La Guardia Civil ha detenido a seis jóvenes por su presunta implicación en la agresión a seis policías locales durante unas fiestas celebradas en Antas (Almería), de modo que entre los arrestados se encuentra D.C.S. recientemente condenado a más de tres años de prisión por liderar un grupo islamófobo y promover mediante sus acciones un "sentimiento de odio xenófobo" en el municipio.
Según ha informado la Comandancia en una nota, a los detenidos se les acusa de la presunta comisión de delitos de atentado a agente de la autoridad, resistencia y desobediencia, amenazas y alteración del orden público en base a la reyerta que protagonizaron el pasado día 23 de julio, cuando durante la celebración de las fiestas de la pedanía de Aljariz seis agentes de Policía Local fueron agredidos mientras prestaban servicio en la zona.
Durante la prestación del servicio en las citadas fiestas, un agente de la Policía Local fue agredido por una persona, por lo que otros dos agentes procedieron a controlarla y reducirla por seguridad, momento en el que cinco de sus acompañantes empezaron a arremeter y agredir a la fuerza policial "con la excusa de defender a autor de la agresión anterior", según la investigación.
Los agentes recopilaron todos los indicios disponibles para identificar y detener a los sospechosos, quienes fueron además filmados en un vídeo ampliamente difundido en redes sociales mientras llevaban a cabo la agresión a varios de los policías locales en una calle de la pedanía.
En este sentido, desde la Guardia Civil reconocen que la difusión de las imágenes en redes sociales, así como en medios de comunicación, ayudó a que muchos ciudadanos aportasen datos de interés para la investigación. Con ello, tras articular un amplio dispositivo para localizar y detener a los sospechosos, se produjo el arresto de todos y cada uno de ellos.
Fuentes cercanas a la investigación de la agresión han confirmado a Europa Press que entre los arrestados se encuentra el cabecilla del autodenominado grupo 'Antas Klan', el cual acaba de ser condenado por la Audiencia Provincial de Almería por delitos de odio contra la población marroquí en el municipio, donde llegó a participar en patrullas nocturnas "pseudopoliciales" de vigilancia y control en el verano de 2019.
Según la sentencia contra la que cabe recurso de apelación, "incitó al odio, la hostilidad, la discriminación y la violencia" contra el colectivo de inmigrantes "con base en motivaciones ligadas a la procedencia, raza y religión". Previamente a este caso le constan otras dos sentencias condenatorias, una de ellas a nueve meses de prisión, por amenazar a un marroquí con prenderle fuego a él y a su casa y por agresión a un musulmán.
El grupo de inspiración supremacista dirigido por el condenado llegó a efectuar un reparto de carteles en el se anunciaba la puesta en marcha de patrullas ciudadanas con las que "tomar el control" de la situación del municipio "tras más de 50 robos, persecuciones machistas de personas árabes hacia niñas del pueblo y ninguna solución" y "sin ayuda de la Guardia Civil, pues no han estado cuando han hecho falta ni se les espera".
"Volverá a reinar la tranquilidad de nuestro pueblo, por las buenas o por las malas", añadía el comunicado en el que aseguraban que "tan culpable es el enemigo como quien mete en casa al enemigo", de modo que los carteles tenían como finalidad generar un "sentimiento de rechazo hacia los inmigrantes por parte de los integrantes" a toda la localidad, "tratando de que los árabes se sintiesen incómodos, inaceptados e incluso de que se les denegase la posibilidad de alquilar casas en el pueblo y así tener que marcharse".
Tras la aparición de estos carteles, tanto el acusado como otros no identificados iniciaron "patrullas nocturnas de vigilancia en Antas" por las que asumían "funciones pseudopoliciales de control e interrogatorio de ciudadanos marroquíes" a quienes pedían "explicaciones de por qué se encontraban en la calle o a dónde se dirigían, acorralándoles e increpándoles con un tono intimidante hacia los integrantes de este colectivo social".
Al condenado se le intervino durante un registro en su vivienda varios carteles de la organización así como dispositivos electrónicos con los que se servía para "sus actividades ilícitas y la organización de los colectivos" con los que "propagar y contagiar a toda la sociedad el odio y desprecio hacia los inmigrantes, especialmente los de origen marroquí que residían en Antas".
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