El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación en funciones, José Manuel Albares, ha valorado este martes que la información que se comparte entre los países que asisten a la sesión del Proceso de Áqaba en el Palacio de la Merced de Córdoba está siendo "muy fructífera".
En una atención a los medios de comunicación, el ministro ha dicho que todos los presentes en la sala "comprendemos que frente al terrorismo, el yihadismo y la radicalización, la cooperación internacional es lo más importante".
En este sentido, Albares ha señalado que "igual que ha hecho el Gobierno de España con una nueva Ley de Cooperación, que pone al Sahel y África Occidental en el centro, no puede haber seguridad sin desarrollo, de la misma forma que no puede haber desarrollo sin seguridad".
Por lo tanto, ha resaltado que el encuentro es "muy positivo". "Estamos todos de acuerdo en trabajar y remar juntos con ese objetivo de luchar contra el terrorismo y la radicalización", ha enfatizado el ministro.
Mientras, ha elogiado que "Córdoba es una ciudad de cultura, historia y, sobre todo, tolerancia", acogiendo en este caso la reunión del Proceso Áqaba, que reúne a 30 países, y que por primera vez se celebra en España.
Al respecto, el titular del Departamento de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación ha comentado que la cita "tiene como foco el terrorismo y la radicalización" en el Sahel y África Occidental, "que es precisamente una prioridad para España y para la cooperación española", citando el protagonismo en la citada nueva Ley de Cooperación española.
Por tanto, "esta región, que son nuestros vecinos africanos, el Sahel y África Occidental, está siendo debatida y tratada por los mayores expertos internacionales", ha subrayado Albares, quien ha recordado que la delegación española está encabezada por Su Majestad el Rey, Felipe VI.
UNOS 200 ASISTENTES DE 30 PAÍSES
En concreto, Su Majestad el Rey de España asiste desde las 10,00 horas de este martes, junto a Su Majestad el Rey Abdalá II de Jordania, a la reunión del Proceso de Áqaba dedicada a África Occidental y Sahel, encuentro que se ha celebrado en el Palacio de la Merced, sede de la Diputación de Córdoba, con la asistencia de 200 invitados de más de 30 delegaciones de países de todo el mundo, sobre todo africanos, con el fin de reforzar la seguridad en la región del Sahel. Han acudido además los presidentes de Ghana, Nana Akufo-Addo; Guinea-Bissau, Umaro Sissoco Embaló; Mauritania, Mohamed Ould Ghazouani, y de la Comisión de la Unión Africana, Moussa Faki, con rango de jefe de Estado.
Unos minutos después de las 9,30 horas, entre una lluvia de aplausos y algún tímido grito de 'Viva España' de los cerca de 300 ciudadanos que se han acercado hasta la Plaza de Colón, el Rey Felipe VI ha llegado al Palacio de la Merced, en cuya entrada principal ha sido recibido por el presidente de la Diputación de Córdoba en funciones, Antonio Ruiz, y el ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares.
Minutos más tarde ha aparecido la comitiva con el Rey Abdalá II de Jordania, quien ha sido recibido por el Rey de España. Una vez juntos, ambos monarcas se han encargado de dar la bienvenida a los jefes de Estado de Ghana, Guinea Bisáu y Mauritania, así como a los representantes de la Unión Africana, Unión Europea y OTAN, antes de realizarse una foto de familia a las puertas de la Casa Palacio previa al inicio de la reunión.
Tras ello, nuevamente entre aplausos y ante un numeroso dispositivo de agentes de Policía Nacional, Guardia Civil y Policía Local en las inmediaciones, las autoridades han entrado en la Diputación para dar inicio a la reunión del Proceso de Áqaba dedicada a África Occidental y Sahel.
REFORZAR LA COOPERACIÓN MILITAR Y DE SEGURIDAD
El Proceso de Áqaba, una iniciativa del Rey de Jordania, desarrolla una serie de reuniones internacionales que persiguen reforzar la cooperación militar y de seguridad, la coordinación y el intercambio de experiencia entre socios regionales e internacionales para combatir el terrorismo. Organizadas con un enfoque regional para cada ronda, las reuniones fomentan discusiones de expertos sobre desafíos de seguridad.
El Rey de Jordania puso en marcha la iniciativa del Proceso de Aqaba en 2015 con el objetivo de impulsar la coordinación y el intercambio de experiencias e información para combatir el terrorismo y el extremismo entre actores regionales e internacionales. Desde entonces, se han celebrado encuentros de este tipo tanto en Jordania como fuera del reino en países como Albania, Países Bajos, Nigeria, Estados Unidos o Singapur. En esta ocasión, la reunión ha estado centrada en los países de África Occidental y el Sahel.
Sus Majestades los Reyes de Jordania han viajado a España para asistir este martes a la reunión del Proceso de Áqaba. Mientras, este lunes Su Majestad la Reina de España junto a la Reina Rania han visitado las Escuelas Taller y Talleres de Empleo de Patrimonio Nacional. Posteriormente, Don Felipe y el Rey Abdalá II han mantenido un encuentro.
A continuación, Sus Majestades los Reyes han ofrecido un almuerzo en honor de los Reyes de Jordania en el Palacio Real de Madrid, en el que Abdalá II ha mostrado su deseo en que la cita permita "mantener discusiones fructíferas con amigos y socios sobre cómo podemos fortalecer la coordinación mundial en la lucha contra el terrorismo y el extremismo".
Por su parte, Felipe VI ha considerado este foro como "un pilar fundamental de la lucha contra el terrorismo". "España contribuye a esa lucha recordando siempre nuestra triste y dramática experiencia", ha señalado, manifestando su rechazo a "esta lacra global del crimen organizado y del terror, que no conoce otra alternativa que la violencia y que se ensaña con nuestra región vecina del Sahel".
La noche de este lunes han asistido a la cena de bienvenida en Córdoba con motivo de la reunión del Proceso de Áqaba en el Alcázar de los Reyes Cristianos, con la asistencia de 60 invitados. Todos ellos han disfrutado de una breve visita por los jardines y fuentes del Alcázar antes de degustar la comida preparada por el chef cordobés Paco Morales.
Una vez terminada la cena, se ha llevado a cabo una visita a la Mezquita-Catedral, que dista unos 500 metros del Alcázar, cuyo interior han recorrido guiados por el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, y distintos responsables del Cabildo Catedral.
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