Los hechos se produjeron en el núcleo de San Pablo de Buceite, donde varios vecinos alertaron a la Policía ante la actuación de operarios de una empresa instaladora que supuestamente habrían estado cobrando precios abusivos a usuarios de gas butano. Los afectados denunciaban que dichos operarios se dirigían al domicilio de personas mayores y, asegurándoles que necesitaban obligatoriamente revisar o reparar la instalación, les hacían firmar el presupuesto y la factura.
Una vez en el lugar, los agentes comprobaron que los operarios pertenecían a una empresa especializada pero no poseían el carnet oficial de instalador, estando su trabajo supuestamente bajo supervisión de un superior que no se encontraba en la población en ese momento. Al mismo tiempo, se informó a los vecinos afectados de la importancia de que presentasen una denuncia para poder actuar legalmente contra la empresa responsable.
Uno de los afectados accedió a denunciar los hechos mientras que otro ha decidido personarse voluntariamente como testigo ante un eventual proceso judicial. Así, la Policía Local ha estado instruyendo diligencias que serán trasladas próximamente al juzgado.
El concejal de Seguridad Ciudadana, Andrés Beffa, ha criticado que “sigan existiendo empresas que se dediquen a trabajar en el límite de la ley y con tan poca vergüenza para cebarse con personas mayores, pensionistas y viudas, a las que en algunos casos cobran por una simple revisión el equivalente a su pensión mensual”.
Del mismo modo, ha animado a los usuarios que se hayan sentido coaccionados o presionados por este tipo de empresas a que lo comuniquen a la Policía Local para que se pueda actuar contra ellas en la medida de lo posible.
Beffa recordó que el usuario tiene el derecho a no dejar pasar al domicilio a ninguna persona que se ofrezca a realizar la revisión del gas si no ha sido solicitada previamente así como a solicitar presupuesto a varias empresas diferentes antes de tomar una decisión al respecto.
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