El PP informó ayer en un comunicado de que, “a tenor de los acontecimientos sucedidos”, Crespo ha solicitado su baja voluntaria como militante y ha puesto a disposición del alcalde, Enrique Moya, las delegaciones de Personal, Deportes, Desarrollo Local y Sostenible que dirigía.
Aunque el partido y el alcalde pidieron a Crespo que entregue su acta de concejal, el edil afirmó a Efe: “Mi acta no me la puede pedir el PP”, ya que la obtuvo como candidato del Grupo Independiente de Benalmádena (GIB), y fue el pasado año cuando decidió integrarse en las filas populares, meses antes de que el PP presentara la moción de censura que desbancó de la Alcaldía al PSOE.
Crespo defendió su inocencia y circunscribió al ámbito familiar este asunto, al tiempo que criticó que parezca “ya condenado”, cuando aún no se ha celebrado el juicio oral, fijado para el próximo 1 de julio.
“Voy a demostrar mi inocencia”, aseguró el edil, quien justificó su decisión de abandonar temporalmente la militancia del PP en que no quiere “perjudicar a otras personas”.
En cuanto a su continuidad como concejal, señaló: “El acta yo la he ganado”, y añadió que no tiene sentido renunciar a ella porque espera que todo se “solucione” en breve y se demuestre su inocencia. Además, señaló que espera poder volver al PP, partido en el que suspende su militancia voluntariamente por una “circunstancia extrapolítica”.
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