El Santo Cristo del Mar y María Santísima de Los Dolores, la cofradía con más tradición en Punta Umbría ha hecho su estación de penitencia este Viernes Santo.
En este año la principal novedad viene marcada en el paso del Santo Cristo del Mar, que ha vuelto a lucir candelabros en lugar de los característicos hachones.
Ya lo hizo de igual forma en la procesión extraordinaria del pasado 10 de septiembre, por el 75 aniversario de su llegada a la localidad y la concesión de la Medalla de Oro. Fue alumbrado por 4 candelabros de plata, y la junta de gobierno ha tenido a bien repetir la misma estampa en esta Semana Santa. También lleva una pareja de ángeles a los pies de la cruz y el llamador ha sido recientemente plateado.
La procesión salió de la Capilla de Lourdes a las 19.00 horas. La vetusta hermandad tomó la cuesta de los Dolores para la Calle Ancha, hasta Montemayor.
La comitiva discurrió por calle Carpa y callejeó por Caracola, Corvina, Plaza del Sol, Piragua y Fragata. La Hermandad se internó posteriormente por calle Ancha para coger la Cuesta de los Dolores y volver a su templo.
Contó por segundo año con la Agrupación Musical Cristo de la Misericordia de Lepe para el paso de misterio y con la Banda de la Escuela Municipal de Música de Punta Umbría para el palio.
La imagen del Santo Cristo del Mar fue donada por la Cofradía de Pescadores en la década de los 50.
A principio de los 80 y, tras años de estío procesional, la imagen volvió a las calles tras la restauración del ayamontino Antonio León Ortega.
María Santísima de los Dolores es una talla realizada en 1942 por el imaginero cartayero Federico López Pereira, donada por la Hermandad de los Mutilados de Huelva.
El imaginero sevillano Luis Álvarez Duarte restauró la imagen tras sufrir daños en un incendio. En la actualidad, el paso de palio se encuentra recién restaurado.
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