Así, para conmemorar esta fecha, los interesados pudieron participar en visitas guiadas por arqueólogos, mientras que un grupo de escolares tendrán la posibilidad de acercarse a la cultura romana a través de un taller de ungüentos y esencias.
Este año, la celebración se desarrolla bajo el lema 'Museos para la armonía social' propuesto por el Comité Internacional para los Museos (ICOM) de la Unesco y que está dedicada a las relaciones intergeneracionales y a otras culturas con el objetivo de hacer partícipe a toda la sociedad de la celebración.
En Baelo Claudia, las actividades comenzaron a las 10,00 horas con una visita guiada por arqueólogos a las salas de exposiciones permanentes y a la exposición temporal. Se repitieron cada hora hasta las 14.00 horas.
Así, los visitantes conocieron la colección de bienes muebles localizados en las excavaciones realizadas en Baelo Claudia que complementan los bloques temáticos del discurso expositivo: urbanismo y arquitectura, la economía, el mundo funerario y la religión y la vida cotidiana.
A esa misma hora, comenzó un taller para escolares de ungüentos. Así, los alumnos conocerán la importancia de la perfumería en Roma, ya que el uso de perfumes y ungüentos se convirtió en abuso e incluso exageración. En Roma, además de las personas se perfumaban las salas de los grandes palacios, los teatros, los vestidos, el vino, los estandartes de las legiones cuando iban a la guerra o cuando volvían victoriosos de sus conquistas, y hasta algún emperador llegó a perfumar a su caballo preferido.
Por otro lado, en el Museo de Cádiz se celebró durante todo el día la actividad 'Miradas', un juego organizado por el Gabinete Pedagógico de Bellas Artes que requirió la participación de los visitantes. Se repartieron unas postales con una serie de miradas extraídas de esculturas y cuadros del Museo, y luego tuvieron que buscarlas por las salas de la institución provincial.
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