El Cádiz sufrió el viernes otro arbitraje clamoroso. Y es que tras agotarse los diez minutos de añadido el colegiado señaló penalti en contra de los amarillos por una mano de Pacha. Los cadistas estallaron de rabia por encontrarse el tiempo finalizado y, también, por existir una falta previa sobre Chris Ramos. Conan, tras protestar al árbitro, intentó parar el disparo y estuvo muy cerca, pero finalmente Ünal anotó para poner el 2-2 en el marcador.
Con el recuerdo del fallo de VAR ante el Elche aún presente, los cadistas se llenaron de una impotencia que gestionaron mal tanto sobre el verde como en la grada y ahora el club se enfrenta a varias sanciones.
Las acciones antideportivas nunca están justificadas, pero sí el enfado. Y es que los cadistas siguen pensando en los puntos que se quedaron en el camino ante el Elche y, también, en otras situaciones que han vivido esta temporada. Como el partido ante el Almería, cuando el colegiado anuló, tras revisar las imágenes, un auténtico golazo de Brian Ocampo por una falta previa de Fali, que estaba sufriendo la presión de Melero.
Y otro partido en el que los amarillos sufrieron un arbitraje desigual fue ante el Valencia. Gonzalo Fuertes no señaló un penalti a favor del Cádiz por un pisotón a Choco en el área. Además, los cadistas no olvidan que este árbitro expulsó la temporada pasada a Negredo por supuestamente simular un penalti. Sin embargo, cuando fue Cavani esta campaña el que lo simuló ante los amarillos, la decisión no fue la misma.
El acta hizo más sangre
Pasaban las horas y Hernández Hernández no hacía pública su acta, por lo que se temía lo peor. Las únicas razones podrían ser fallo de internet, algo que en un estadio de Primera no es viable, o que el colegiado tuviera mucho que contar. Y eso pasó. Ahora, se esperan sanciones.
Sobre Iza Carcelén apuntó que “una vez finalizado el partido y cuando todavía nos encontrábamos sobre el terreno de juego golpeó con su mano en la cabeza de un adversario con el uso de fuerza excesiva”. Si esta acción se considera agresión, el portuense podría enfrentarse a una sanción entre 4 y 8 partidos. El jugador reconoció su error y pidió perdón a través de sus redes sociales.
Una vez en el túnel de vestuarios siguieron sucediendo cosas según explicó Hernández Hernández. Sobre Conan Ledesma recogió que “cuando nos encontrábamos en el túnel de vestuarios estando detenidos sin poder acceder al mismo, el jugador local Jeremias Conan Ledesma empujó a un compañero de equipo que se encontraba pegado a mi espalda con el objetivo de que éste impactase contra mí, consiguiéndolo”. Y es que aquí vienen los problemas para el Cádiz. El portero puede enfrentarse a una sanción entre cuatro y doce partidos.
No obstante, el Cádiz ya trabaja para evitar que esa sanción se materialice y, en caso de hacerlo, que sea la más baja posible. De hecho, el club presentó alegaciones asegurando que tiene imágenes que corroboran fallos en la redacción del colegiado. “El acta del partido adolece de errores e inexactitudes notorias y trascendentes”, por lo que se confía en que Conan e Iza queden sin sanción.
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