El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ha afirmado este miércoles que le aterra que uno de los agresores sexuales o violadores que haya salido de la cárcel por la rebaja de penas fruto de la aplicación de la ley del "solo sí es sí" vuelva a delinquir.
"Ha habido revisiones de condenas, es verdad que son personas que han cumplido una parte de la condena, en su mayor parte la gran mayoría de la pena, pero es verdad que ese escenario que me plantea claro que nos aterra, pero bueno, de esas personas y de cualquier otra. Es algo lamentable", ha contestado en una entrevista en Telecinco ante la pregunta de si se plantea que uno de las personas que ha salido o bien en libertad o se le ha rebajado considerablemente la condena por la aplicación de la Ley de Garantía Integral de Libertad Sexual viola a una mujer o abusa de un niño.
Ante la cuestión de por qué el Gobierno no cambia la norma, ha insistido en que cuando se modifica el Código Penal siempre hay periodos transitorios en lo que se tienen que ajustar las penas y en los que se tiene que unificar criterio a través del Tribunal Supremo.
Ha agregado que la polémica que se está viviendo con esta ley, que ha defendido porque supone avances muy importantes, le ha servido para ser consciente del enorme número de casos de agresiones sexuales que hay en España y por ello, ha dicho, el Gobierno no puede escatimar en esfuerzos.
El ministro se ha referido también a la polémica surgida por las medidas antiabortistas que quiere implantar Vox en Castilla y León y ha señalado que los requerimientos enviados al Gobierno de la Junta buscan defender que no haya ningún retroceso en los derechos de las mujeres.
Ha añadido que si el Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco contesta formalmente, no por vía epistolar, y con claridad a los requerimientos que esas medidas no se van a implementar se quedarán "tranquilos" pero ha remarcado que uno de los socios de Gobierno, Vox, insiste en que está acordado y por escrito.
Mañueco volvió a insistir ayer, en este caso en una carta dirigida al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en que "no habrá ninguna modificación en el protocolo de atención a la interrupción voluntaria del embarazo" y en que "no se obligará a nada ni a los facultativos ni a las mujeres".
"Que se pongan de acuerdo la derechita y la ultraderechita", ha añadido, para asegurar que no es necesario que exista un documento por escrito o protocolo para vulnerar la ley, ya que existe la vía de hecho, a la que podría apelar el Gobierno si quiere seguir el procedimiento abierto ayer para llevarlo al Tribunal Constitucional.
Ha señalado además, en relación al estudio por parte del Tribunal Constitucional del recurso contra la Ley del aborto que presentó el PP en 2010, que este partido podría haber retirado el recurso durante los últimos 13 años y no lo han hecho, y ha afirmado que la historia de la formación que ahora dirige Alberto Núñez Feijóo está marcada por su rechazo a leyes fundamentales para el avance en derechos de las mujeres, como la ley del divorcio o la ley de igualdad.
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