Fuentes municipales informaron a Efe de que el taxista fue identificado gracias a la colaboración de las dos principales asociaciones del sector, aunque hasta ayer no pudo declarar porque el lunes se tomó su día de descanso.
La declaración de este testigo se remitirá al juez de Instrucción 9 de Sevilla, que investiga el atropello mortal de dos chicas de 26 y 30 años cuando cruzaban el Paseo de Colón de Sevilla y fueron arrolladas por un vehículo cuyo conductor doblaba la tasa legal de alcoholemia.
El conductor, Fernando V. C, de 25 años, se encuentra en prisión provisional desde el mismo día del atropello, acusado de dos presuntos delitos de homicidio por imprudencia, si bien el juez no le acusó de omisión del deber de socorro por, supuestamente, haber huido del lugar sin auxiliar a las víctimas.
El imputado negó al juez haber huido del lugar del siniestro y lo mismo hizo su acompañante, un hijo de José María del Nido, presidente del Sevilla FC, quien a través de un portavoz familiar precisó que se detuvieron en cuanto se percataron del accidente.
El taxista, según los testigos del accidente, presenció el atropello e interceptó el coche de Fernando V. C. a la altura del teatro de la Maestranza, a unos 200 metros del lugar del impacto.
El conductor implicado tenía retirado el permiso de conducir pues había perdido todos los puntos.
Averiguar a la velocidad que circulaba
Mientras, la Policía Local, dentro de la investigación abierta para intentar esclarecer las circunstancias que rodearon al doble atropello mortal, se encuentra intentando esclarecer si la persona detenida por estos hechos circulaba con su vehículo a más de 80 kilómetros por hora, lo que podría suponer que se le imputara un nuevo delito.
De este modo, las fuentes consultadas por Europa Press explicaron que, según la Ley, circular con un vehículo a más del 50 por ciento de la velocidad máxima genérica de la vía en cuestión constituye un delito contra la seguridad del tráfico, precisando que, en el caso concreto del doble atropello mortal, sería delito que el imputado circulara con su vehículo a más de 75 kilómetros por hora.
Al hilo de ello, las mismas fuentes pusieron de manifiesto que, al objeto de comprobar y confirmar la velocidad con la que circulaba en el momento de los hechos el turismo, un Renault Clío de color verde, existen una serie de fórmulas que serán aplicadas en este caso concreto, pues la velocidad será un elemento clave dentro de la instrucción de la causa abierta por el Juzgado de Instrucción número 9 de Sevilla.
Como consecuencia del atropello fallecieron dos mujeres, P. A. H, de 26 años, y A. G. D, de 30, a las 00,45 horas del pasado domingo, a la altura de la Torre del Oro de Sevilla por Fernando V. C, que dio positivo en la prueba de alcoholemia. A consecuencia del suceso, además de las dos jóvenes fallecidas en el acto, otras dos personas tuvieron que ser atendidas por efectivos sanitarios del 061, ambos por crisis de ansiedad.
Según las primeras valoraciones de la Policía, el conductor debía circular a una gran velocidad, dada la gravedad del impacto con el vehículo, un Renault Clio de color verde. Al parecer, los cuerpos impactaron con violencia y fueron desplazados casi 40 metros, donde quedaron tirados en medio del Paseo de Colón.
Al conductor se le imputan dos presuntos delitos de homicidio por imprudencia, así como un supuesto delito contra la seguridad del tráfico con resultado de muerte. Por ello podría ser castigado penalmente con hasta ocho años de prisión, según fuentes jurídicas consultadas por Europa Press.
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