En este sentido, facilitaron datos aproximados sobre el número de prostitutas que ejercen en la provincia que serían más de 2.000 (entre 2.070 y 2.105) basándose en las que ejercen en los clubes (115 en la Bahía y 92 en el Campo de Gibraltar). Así serían unas 1.150 en la Bahía de Cádiz si se toma como media a 10 trabajadoras por club y a 1.725 si se toma como media a 15 trabajadoras a las que hay que añadir 920 en Algeciras si se opta por la primera media y 1.380 si es la segunda. A este número hay que añadir las que ejercen en la calle.
En cuanto a las nacionalidades, el mayor número de personas que ejercen la prostitución son inmigrantes, con gran porcentaje de irregulares, un 65 por ciento- siendo la mayoría de Nigeria, seguido de Rumania y Latinoamérica. La mayoría tiene entre 18 y 30 años y son solteras o separadas.
Por otra parte, la zona de la Bahía de Cádiz donde más concentración de prostitución existe es en El Puerto de Santa María. La responsable del proyecto sobre prostitución de la Apdha, Inmaculada Gala, -que presentó el informe junto con Marisol Gómez- hizo referencia también a las dificultades con las que estas mujeres se encuentran, entre ellas las deudas a los que las trajeron y las cargas familiares así los problemas legales con la Ley de Extranjería.
Gala señaló que no todas las mujeres extranjeras que ejercen la prostitución son víctimas del tráfico y trata de personas y apuntó que en la zona de la Bahía de Cádiz no se han encontrado ningún caso de este tipo.
Asimismo, destacó que los municipios de la zona no hayan reglamentado en ninguna ordenanza la situación de la prostitución apuntando que todos “quieren verla lejos”.
No obstante, señaló que el hecho de que muchas no cuenten con documentación para residir de manera legal en España, hace que sufran situaciones de explotación y abusos además de impedir la reagrupación familiar.
Defendió que se reconozcan los “derechos” que las prostitutas deberían tener como trabajadoras en cuanto a cotización y prestaciones y pidió acabar con el “mito” de que la prostituta es “una mujer mala”, ya que “detrás de cada una de ellas hay una mujer con mucha dignidad”.
En cuanto a la relación existente entre prostitución y droga, la responsable del proyecto de Apdha, señaló que esa relación se suele dar en mujeres de nacionalidad española en situación de marginalidad y no tanto en mujeres inmigrantes.
Legalización
En cuanto a la legalización señalaron que se “debe legalizar pero no como una profesión cualquiera”. Asimismo citaron que en el tema de las enfermedades además de las sexuales también padecen otras relacionadas con su actividad.
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