Misión imposible. Los altos precios, la baja oferta y la alta demanda son un auténtico calvario para aquellas personas que buscan una vivienda en alquiler en la provincia gaditana, que se ajuste a sus necesidades y a su salario fuera de la Sierra de Cádiz. Actualmente, el 58% de los alquileres en la provincia superan los 750 euros.
No es de extrañar que muchos desistan a la hora de buscar una vivienda en Cádiz, teniendo en cuenta la escasez de oferta, que se ha reducido un 35% en los últimos años, y el incremento desproporcionado del precio mensual del alquiler; un 24% más alto desde 2017.
"Si hablamos de oferta, la oferta ha bajado notablemente. La provincia ahora mismo tendrá unas 3.000 viviendas en alquiler y en Cádiz unas 300. Van entrando y saliendo. Pero esa sería la media. Al hablar de precios, pasa todo lo contrario. Los alquileres se han incrementado hasta el 24%. La media en la provincia ronda los 750 euros, aunque depende de la zona. En Cádiz, es aún más caro y una vivienda puede salir 900 o 1.000 euros" explica la gerente de 'Comunidades del Sur' y presidenta de GICA (Gestores Inmobiliarios de la Provincia de Cádiz), Begoña Gómez Roldós
Precio al que cuesta hacer frente con solo una nómina.
"Pagar 700 euros por una casa con dos habitaciones o tres habitaciones es exagerado" se queja una ciudadana.
Un problema que se agrava para los jóvenes con o sin bono joven de alquiler, para el que la Junta de Andalucía aún no ha publicado convocatoria.
"A cada casa le salen 20 novios pero el propietario, puesto a elegir, prefiere a una persona con estabilidad laboral, una nómina estable y segura como la de un funcionario. Lo que hace más difícil aún la vivienda para jóvenes", afirma la gerente.
El sector inmobiliario avisa "esta situación podría empeorar de darse otra crisis económica".
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