Fuentes del PSOE federal y andaluz han confirmado a Efe que ambas direcciones están intentando ultimar la fecha del cónclave y ajustar la disponibilidad de la agenda de los máximos líderes federales con la idea de que puedan clausurarlo.
El congreso será en marzo y "toma fuerza" el tercer fin de semana de ese mes -entre los días 19, 20 y 21- y se celebrará, muy posiblemente en Sevilla, aunque no se descarta que pueda ser una semana después.
La celebración del congreso pondrá fin a meses de "dimes y diretes" sobre el relevo de Chaves por el actual presidente de la Junta, José Antonio Griñán, a los vaivenes sobre la conveniencia o no de celebrarlo y a casi un año de bicefalia entre ambos dirigentes no exenta de "algunas discrepancias".
La secretaría de Organización andaluza y las provinciales necesitan algo más de un mes para tener listo el operativo que debe movilizar a más de 750 comités locales, de donde saldrán elegidos los centenares de delegados que acudirán a este congreso.
Sin embargo, la dirección ya tiene lista la fórmula que impedirá que el secretario general saliente Manuel Chaves tenga que dimitir y prevé, en aplicación de los Estatutos, que la convocatoria del congreso la realicen bien la Ejecutiva bien el Comité Director por tratarse de una situación extraordinaria o singular como la sucesión en la Junta.
Si los principales protagonistas implicados en el cambio siguen la frecuencia anunciada, será el presidente Griñán el que comunique a los órganos internos la fecha definitiva del congreso y Chaves el que la haga pública como máximo dirigente del partido en Andalucía tras el respaldo de la Ejecutiva andaluza.
La convocatoria dará respuesta a la polémica surgida a raíz de la bicefalia y del liderazgo en el partido, aunque supone un cambio sustancial en los planes previstos por Chaves y Griñán que el pasado noviembre acordaron no esperar al verano del 2012 para celebrarlo.
El propio Chaves confirmaba ayer que será en marzo cuando se celebre el Congreso extraordinario, asegurando que aún no había fijada una fecha concreta, ni la ciudad en la que tendrá lugar el cónclave.
Por su parte, Griñán declaraba ayer en Mérida que el cambio en la cúpula del PSOE-A es "una noticia que ya estaba descontaba" porque "se va a producir el relevo del secretario general en el congreso que, por eso, es extraordinario".
Aunque se decanta por una fecha -que no reveló-, aseguró que la someterá al conocimiento de la ejecutiva, mientras que sobre la hipotética integración de Mar Moreno en la nueva Ejecutiva andaluza dijo que "cuando llegue a ese río, cruzaré el puente".
Cambios en el Comité Federal
El PSOE baraja nombrar en el Comité Federal del próximo sábado al secretario de Estado de Política Territorial, Gaspar Zarrías, como sustituto de Mar Moreno al frente de la Secretaría de Relaciones Institucionales y Política Autonómica de la Ejecutiva del partido.
El presidente del PSOE, Manuel Chaves, dijo ayer en el Senado que esta "hipótesis de sustitución se ha barajado" desde hace tiempo con la intención de "reforzar" el área institucional de la Ejecutiva, ya que la titular, Mar Moreno, es consejera de Educación "con una responsabilidad muy importante y un trabajo muy intenso en el Gobierno andaluz".
Chaves dijo que "la persona en la que se ha pensado" para sustituir a Moreno es Zarrías, por "sus conocimientos" y su "experiencia", aunque recalcó que se trata de una decisión que deberá adoptar el Comité Federal del partido.
"Es lo que puedo decir. No sé si está decidido, si se va a tomar esa decisión el sábado a lo largo de la reunión del Comité Federal. Puede ser que sí o no", indicó Chaves antes de subrayar que no podía adelantar una decisión que corresponde al máximo órgano de dirección del PSOE "por respeto" a sus miembros.
En los mismos términos se pronunció el consejero andaluz de Gobernación, Luis Pizarro, quien dijo que es "muy respetuoso" con los procedimientos que tienen que resolver los órganos del partido.
Pizarro elogió la figura de Mar Moreno, "allí donde el partido ha decidido que esté", y dijo que no tiene "más que palabras de valoración positiva" respecto a su nivel de responsabilidad, dedicación y buen hacer.
Por su parte, la secretaria de Política Autonómica y Relaciones Institucionales del PSOE, Mar Moreno, dijo ayer que "hace unos días" comunicó al partido su deseo "de abandonar la dirección del partido y la Secretaría de Política Autonómica e Institucional".
En declaraciones a los medios en un receso de la Conferencia Sectorial de Educación, Moreno, que también es consejera de Educación, enmarcó su decisión en el deseo de "concentrar su trabajo en Andalucía" y añadió que "está muy satisfecha con el tiempo compartido".
No obstante, Moreno subrayó que la decisión se tendrá que tomar en el marco del Comité Federal, que se celebrará el próximo sábado.
Las fuentes consultadas discrepan a la hora de evaluar el alcance de los previsibles cambios y la renovación que acometerá Griñán en la Ejecutiva y el Comité Director, en un momento en el que el último sondeo del IESA da al PP la ventaja por un estrecho margen, el paro siguen aumentando en la comunidad y se cuestiona la cercanía de sus dirigentes a la sociedad.
La dirección descarta, de momento, que vaya a haber una candidatura alternativa y espera un respaldo "masivo" a Griñán, pero insiste en la idea de que los congresos socialistas son "siempre abiertos" y en que "se sabe como empiezan pero no como acaban".
Arenas ve a la sociedad "atónita" porque PSOE solo se ocupe de su congreso
Por su parte, el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, lamentó ayer que mientras el PSOE se dedica a preparar su congreso para nombrar secretario general a José Antonio Griñán la sociedad andaluza está "atónita" porque "nadie se mueve" para resolver sus problemas.
Durante su intervención en un acto sobre educación en Castilleja de la Cuesta (Sevilla), Arenas se mostró convencido de que el Gobierno andaluz lleva perdidos "dos años" en cuestiones internas, el primero con la marcha del ex presidente de la Junta Manuel Chaves y el segundo con el congreso que elegirá a Griñán.
En su opinión, en el PSOE y en el Gobierno andaluz han estado más preocupados por "quiénes ocupan los sillones" que por la situación que padecen los andaluces, con una cifra de un millón de parados, y con la sensación de que "nadie se preocupa" de gobernar.
Se mostró extrañado por que un partido convoque un congreso extraordinario exclusivamente para hacer "líder" a una persona, y destacó que se equivocan quienes consideran a Griñán un líder social "que hay que convertir en líder político" porque "a quien conoce el 20 por ciento de la población no es un líder social".
Lamentó que los socialistas se centren en sus cuestiones internas y en los "problemas de liderazgo" de Griñán pero dijo que, mientras tanto, el PP se dedica a hacer propuestas para contribuir a la salida de la crisis económica y sobre otras cuestiones que "en realidad interesan a los ciudadanos".
"Un 80 por ciento de la ciudadanía apoya que se abran estos debates", subrayó Arenas, en alusión a asuntos como la crisis económica, el problema del empleo, la implantación o no de la cadena perpetua, o los asuntos relacionados con la inmigración, propuestas que contrastan con las del Gobierno de la Nación.
A su juicio, los debates que ha abierto el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, son los que "dividen" a la sociedad y puso como ejemplo la memoria histórica o el aborto.
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