Unos 700 niños procedentes de los campamentos de refugiados del Sahara pasarán dos meses del verano en Andalucía, cifra que podría ser mayor una vez que se cierren peticiones concretas de algunas provincias para encauzar ya los viajes de los niños desde el desierto.
Según ha informado a EFE la coordinadora de la Federación Andaluza de Asociaciones Solidarias con el Sahara (FANDAS), Ángeles Ariza, de los 700 niños, unos 520 dependen de las gestiones que ha realizado la propia FANDAS, mientras que los restantes los ha gestionado la Asociación de la Amistad con el Pueblo Saharaui de Sevilla, que no pertenece a la Federación.
Ariza ha concretado que desde la provincia de Granada se ha pedido un nuevo ”pasaporte colectivo”, la fórmula con la que un número indeterminado de niños podrán sumarse al viaje, lo que se espera concretar en una semana aproximadamente.
Una vez que se sepa la cifra, se esperará a la publicación de los permisos en el Boletín Oficial del Estado, y se podrá sacar adelante el programa conforme a lo previsto.
Mientras tanto, se están llevando a cabo los contactos necesarios con los aeropuertos de Sevilla y Málaga, para coordinar los vuelos de la Air Algérie que llevarán a los niños a suelo andaluz.
El Proyecto Vacaciones en Paz tiene como principal objetivo la llegada de niños y niñas saharauis, procedentes de los campamentos en Tinduf (Argelia), y permite que los nacidos en 2014 (8 años de edad como mínimo), pasen dos meses fuera del desierto.
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