El Martes Santo llegó y La Magdalena se echó a la calle con el deseo de acompañar en procesión a su Cofradía, la del Santísimo Cristo de la Clemencia, Nuestro Padre Jesús de la Caída, Santa María Magdalena y María Santísima del Mayor Dolor. Sin embargo, tras horas de incertidumbre por un mediodía de nubes y aire que anunciaban lluvia, la junta de Gobierno, de la que es Gobernador Jesús Juárez, decidió no salir en procesión, haciendo que se parara el latir de los corazones cofrades. Con una salida prevista a las 17 horas, el anuncio de posponer la decisión a las 17:45 horas hizo presagiar lo que finalmente ocurrió.
“La decisión ha sido premeditada. Hemos barajado diferentes partes meteorológicos para saber qué puede pasar durante la tarde-noche de este Martes Santo. Hay mucha incertidumbre, la probabilidad de lluvia es alta, está lloviendo y está pasando una borrasca. Hemos consultado y vienen chubascos intensos, por lo que en cualquier momento la lluvia puede hacer daño al patrimonio de la Cofradía, que es muy valioso, y al patrimonio humano, nuestros hermanos de luz, costaleros, mantillas y bandas”, dijo el Gobernador al anunciar la suspensión de la procesión de penitencia.
Seguidamente, el consiliario de la Cofradía, el sacerdote Juan Raya, guio a los cofrades en una oración, para consolar la pena por no poder salir a la calle. Siempre duele esta decisión, pero tras esperar este Martes Santo dos Semana Santa sin procesiones, quedarse en la parroquia hizo que se derramaran lágrimas.
El Gobernador pidió a los hermanos de la Clemencia que no estuvieran triste y agradeció la paciencia y actitud de los jiennenses en los momentos de espera. “No ha sido fácil, pero por encima de todo están los titulares, el patrimonio y todos los cofrades de La Magdalena”, explicó, animando a vivir la Cofradía “todo el año”.
Dijo: “Todo el año Jesús y María están esperando nuestra oración y visita”.
El templo dejó sus puertas abiertas para que los jiennenses pudieran venerar y rezar a las imágenes y lo hicieron con la colaboración propia en tiempos de Covid, respetando turnos de entrada y salida y, sobretodo, con respeto al estar en un templo. A las ocho de la tarde se celebró el rezo del Santo Vía Crucis y comenzó la cuenta atrás para el Martes Santo de 2023. Los momentos previos a la decisión de suspensión fueron muy emotivos.
Las imágenes tenían sus velas encendidas, el Cristo de la Clemencia lucía su nueva corona de espina, el estreno principal con el que se recuperaba la impronta primitiva de la Sagrada Imagen; además de sus nuevos faroles pequeños, que daban luminosidad al paso y al Cristo.
En un 2022 en el que se está celebrando el 75º aniversario de María Santísima del Mayor Dolor y el 30º aniversario de la creación del cuerpo de costaleras de la Virgen, pionero y señero en la Semana Santa jiennense, no rezar bajo el palio fue doloroso.
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