Quince años después de que se publicara El Club Dumas, Arturo Pérez-Reverte afirma que no cambiaría “ni una línea” de esta novela, que abrió puertas a otras del mismo género, consiguió lectores en medio mundo y le sirvió al escritor para darse cuenta de que podía “vivir de la literatura”.
“El Club Dumas es un pedazo de mi vida. Es el mejor libro que pude escribir en ese momento y le dediqué todo mi esfuerzo e ilusión; modificar algo sería renegar de todo aquello”, dice Pérez-Reverte en una entrevista con Efe, coincidiendo con la llegada a las librerías de una edición conmemorativa de esta novela, publicada por Alfaguara.
El libro, claro homenaje a Alejandro Dumas, uno de los escritores predilectos de Pérez-Reverte y “el primer hilo de esa tela de araña maravillosa que es una biblioteca”, estuvo respaldado por el éxito desde que nació: se han vendido dos millones y medio de ejemplares en todo el mundo y está publicada en 51 países, 30 de ellos de lengua no española.
Pero en su día, esta obra constituyó “un desafío” para el autor, que quiso demostrar que “con Dumas puede hacerse algo más que una novela de mosqueteros”. Para ello mezcló “elementos del viejo folletín europeo de masas con la novela posmoderna”.
“Ahora, escribir una novela de este tipo es jugar con un mercado que ya existe, pero hace quince años suponía arriesgarse a que no te leyeran, porque no había un público para estos libros”, asegura Pérez-Reverte, muy crítico siempre con aquellos que desprecian la novela del siglo XIX y principios del XX y sólo consideran válida la literatura “desde Faulkner y Cortázar para acá”.
“Al lector lo había hecho desertar la panda de gilipollas que tenía secuestrada la literatura, y tan sólo héroes como Juan Marsé o Eduardo Mendoza habían mantenido ese hilo sutil pero todavía firme con la literatura que te contaba cosas”, señala el escritor murciano con su habitual forma de hablar, sin pelos en la lengua.
Llevada al cine por Polanski bajo el título de La novena puerta, El Club Dumas funcionó “de maravilla” desde el principio. Con este libro, “por primera vez”, Arturo Pérez-Reverte se sintió “tranquilo como escritor”. “Hasta entonces, era un aventurero; yo no era del mundo literario, no tenía ninguna pretensión en ese terreno.
Pero con esta novela me di cuenta de que podía vivir de la literatura y de que había un tejido de lectores, en España y en el extranjero, que ya me daban una seguridad. Con El Club Dumas empiezo a irme del periodismo”, comenta el escritor.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es