El palista onubense Álvaro Robles ha firmado en su vida deportiva y personal un 2021 irrepetible, que llevará por siempre marcado a fuego en su memoria, pues ha vivido el sueño olímpico, ha estado a un alto nivel todo el año y además ha sido padre.
"El 2021 ha sido espectacular en lo deportivo y en lo personal. Sin duda el mejor año de mi vida hasta el momento con la clasificación a los Juegos, la experiencia de vivirlo en Tokio y el nacimiento de mi hija", manifestó a Efe.
Robles pasó una ronda en los Juegos de Tokio y cayó en el siguiente cruce después de ganar previamente un exigente preolímpico Europeo en Guimaraes (Portugal). Además rozó la medalla en el Mundial de Houston (Estados Unidos) en los dobles mixtos con María Xiao, con la que completó buenos torneos internacionales.
También ganó el 'Spain Másters', conquistó su tercer título de campeón de España, se proclamó subcampeón en Düsseldorf (Alemania) y lideró al equipo español con un buen balance personal en el Campeonato de Europa de Naciones.
"En 2022 espero seguir en esta misma línea, trabajando para seguir mejorando y estar sano y en forma para competir en las mejores condiciones", reflejó el palista onubense, que estos días luce el pelo de rubio platino por una apuesta.
El contraste lo pone la Bundesliga, donde su club, el TTC Schwalbe Bergneustadt alemán, es séptimo con cinco victorias y seis derrotas, a dos de la cuarta plaza, que da derecho a la final entre cuatro que sí disputó en la última ocasión.
"Estamos sufriendo bastante esta temporada", reconoció Robles, quien no obstante comentó que "por suerte se ganaron los dos últimos partidos y el equipo está en una situación un poco más relajada de cara a la segunda vuelta".
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