Hace más de un mes que el volcán Cumbre Vieja, en la isla canaria de La Palma, comenzó a rugir y a expulsar lava. Las pérdidas que están sufriendo los palmeros desde entonces son enormes y, a los hogares que han quedado bajo las coladas, se suma la destrucción de parte de los cultivos de plátanos de Canarias, una de las principales fuentes de riqueza de la zona.
Por ello, como gesto de solidaridad y empatía, las Escuelas Infantiles Municipales Koala de Andalucía, que reúnen a más de 2.500 alumnos matriculados para este curso, entregarán una vez a la semana y hasta que finalice el año una pieza de esta fruta con denominación de origen.
Con esta iniciativa, llevada a cabo en todo el territorio nacional, se busca contribuir a la recuperación de la economía insular ya que semanalmente Koala comprará más de 6.000 plátanos de Canarias para los 97 centros de toda España en los que presta servicio la compañía.
Asimismo, se pondrán en valor las propiedades de este alimento tan sano que aporta vitaminas y minerales esenciales para el desarrollo de los más pequeños al favorecer el normal funcionamiento del sistema inmunitario, nervioso y de la función psicológica.
Del mismo modo, y de cara a las familias, se les hará entrega de un plátano disfrazado de pirata o súper héroe para que resulte más llamativo a los pequeños, así como de una carta informando sobre el proyecto. También se les animará a participar desde casa, proporcionándoles una receta de galletas de avena y plátano sana, rica y fácil de preparar, y animando a compartir las fotos de esta actividad solidaria en redes sociales con el hashtag #KoalaConLaPalma .
Este proyecto se suma a la corriente de apoyo que desde Clece y sus filiales, entre las que se incluye Koala, se lleva produciendo desde el pasado 19 de septiembre, cuando los 365 trabajadores de la compañía en la isla se reorganizaron para reforzar la limpieza en los lugares donde se alojan los damnificados así como para ofrecer ayuda a todas las personas desplazadas mientras continuaban atendiendo a sus labores en los colegios, hospitales y centros de salud palmeros.
Además, en este contexto tan inesperado y duro las mascarillas se han convertido en una protección aún más fundamental para los expuestos a las emisiones del volcán. No en vano, los gases y la ceniza expulsados pueden provocar problemas respiratorios, sobre todo en las personas más vulnerables. Por este motivo, desde Clece se lograron reunir 25.000 mascarillas que ya están siendo aprovechadas por los habitantes de La Palma.
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