Junio se presenta con ganas y fuerzas en este año 2012; que promete ser el último; aunque más que por los Mayas, será por la política y acciones de unos seres presentes.
El último curso para mucha gente se va acabando, para otros, no es el último, pero en breve finiquitará hasta dentro de tres meses mal contados. Entre recuperaciones, adelantos de cursos, tarea extraescolar, actividades… Vamos, que el niño hará de todo menos descansar una semana seguida; ¡y algunos padres para colmo se quejarán!
En definitiva, que entre desánimos por los suspensos, la presión de los padres y los recortes del Estado, aquí no vive tranquilo ni Dios… Cada vez serán menos los que sientan esta presión, no porque se acostumbren, no; sino porque no hay dinero para seguir sintiéndola. No hay becas, más caro estudiar en la universidad “pública”, y si a eso le sumamos que las familias españolas no están en alza… Pues, adiós carrera, adiós.
Por eso decía que muchos acabaran este año sus estudios; si queréis rematamos la faena amenazando con el cierre de algunas universidades… Anda que no, en España seremos una población ni-ni-ni… Ni estudiamos, Ni trabajamos y Ni nos dejan hacerlo.
¡Ains! Qué feliz era yo, ignorante de la vida política, en el instituto, subsistiendo a los que eran mi mayor riesgo; los chungos de la clase e intentando sacar una nota suficiente. Ahora, en el presente, volvería al pasado y sería yo el que me amenazara a mi mismo para que intentara sacar más nota… Con esto de que la gente al no trabajar vuelve a estudiar, las medias en las carreras y los grados de formación profesional están disparadísimos…
Aunque me pregunto, actualmente, ¿cómo motivas a un alumno? En San Fernando, fatal… Que se asome a la bahía y contemple el horizonte, puesto que lo que queda a sus espaldas no le va a dar futuro, nos estamos convirtiendo en una ciudad dormitorio, y poco más…
No obstante, no todo es culpa de la situación actual, motivar a un alumno se vuelve harto de difícil cuando tiene unos profesores que solo buscan su interés económico al dar las clases, y no sé muy bien porqué, sacar provecho de sus alumnos… Sí, eso de hacer fijo a gente sin espíritu por su trabajo es malo, pero que encima se dediquen a la enseñanza pública… Que se despidan de unos 30 alumnos por año… Ese “profesor” no va a esgrimir su asignatura con ganas, y eso provocará caídas espectaculares en esa asignatura… A menos que le hagas, lo vulgarmente llamado, “pelota”. Sin comentarios…
Yo lo siento mucho por el trabajador de turno que ha caído donde no le gusta, pero más que mirar por su bolsillo, debería saber que en ciertos puestos de trabajo de cara al público no se puede estar sin ganas, estamos trabajándonos al futuro de nuestro supuesto país; los siguientes alcaldes, policías, profesores, o personal de mantenimiento, están ahí dentro de tu aula… ¿Desganas vas a importarle?
Es cierto que es solo un escollo, de otros tantos, sin embargo, un pequeño movimiento en un mecanismo tecnológico puede cambiar el resultado final… Pues con esto lo mismo, una pequeña piedra puede hacer tropezar un futuro incierto, dañar un futuro impecable y hundir un futuro a la deriva.
Y vuelvo a decir, no toda la culpa es entre política y profesorado… Los antecesores también aportan su grano de arena. No puedes exigir lo que nunca conseguiste, del mismo modo que deberías de alegrarte porque tu hijo sigue con ganas de estudiar, aunque no sea lo que tú querrías… Cuanta hipocresía se disipa en el ambiente familiar en estas épocas de entrega de calificaciones académicas…
Reconozco que yo tampoco soy un modelo a seguir, volvería atrás en el tiempo y cambiaría muchas cosas. No obstante, debemos seguir hacia delante, contra recortes, profesorado inútil y familiares irreconocibles… Para adelante, que el camino es largo, pero no eterno.
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