Confirmado. Abengoa ha traspasado a la empresa Cuadros Eléctricos Nazarenos (CEN), con sede en Dos Hermanas (Sevilla), la parcela de 37.000 metros y la nave taller de su filial Inabensa. Esta empresa seguirá ahora ocupando parte de las instalaciones y pagará un alquiler a CEN por ello. Inabensa está instalada sobre una parcela de la autoridad portuaria de Sevilla, que ha autorizado el traspaso del 100% de las acciones de la empresa propietaria del suelo y la nave (una filial a su vez de la propia Inabensa) a CEN.
De esta forma, como www.andaluciainformacion.es avanzó el pasado 5 de septiembre, la pequeña pyme sevillana que trabaja en el mismo sector de ingeniería eléctrica que Inabensa da un paso de gigante para expandirse aprovechando la crisis de Abengoa. CEN es 25 menor que Inabensa teniendo en cuenta los ingresos de ambas: 10 millones de media anual de Cuadros Eléctricos frente a 390 millones que facturó Inabensa en 2015, según las cuentas depositadas en el registro mercantil.
La compañía nazarena, que dirige José Manuel Gómez, venía siendo proveedor de la propia Inabensa y ha realizado esta operación con apoyo económico de un fondo, cuya identidad se desconoce. En los últimos meses del pasado año, también el fondo de capital riesgo Springwater visitó Torrecuéllar interesándose por las instalaciones. La filosofía de inversión de este fondo suizo es la de no tomar participaciones mayoritarias en las empresas que compra, sino acompañar a socios industriales. Operativa que se ajusta a la de CEN.
El grupo hispalense CEN, fundado en 1994, es una suerte de pequeña Inabensa, ya que trabaja también para los sectores industrial, ferroviario, aeronáutico, de telecomunicaciones, transportes y agua. Y realiza cuadros eléctricos en una planta de 6.000 metros cuadrados que inauguró en 2010. Emplea a unas 120 personas, por las 1.600 de su inquilino (530 en Torrecuéllar).
Más suelo a Tecade y Estibadora sevillana
Inabensa, que era una de las casi 40 filiales de Abengoa que entró en preconcurso en noviembre de 2015 junto a la propia matriz, ha realizado un ajuste de personal mediante despidos (72 personas) y reducción de jornada (Erte) para otros 220 empleados durante ocho meses desde julio. Fue la primera compañía que acometió un recorte de plantilla en Abengoa, tras lo cual se han presentado más de diez Erte en otras tantas filiales ubicadas en la sede central de Palmas Altas (Sevilla) entre julio y agosto.
Ello supone que las medidas de ajuste de costes afectan a un tercio de la plantilla total en España, de mil personas. Inabensa cuenta también con un taller en Alcalá de Henares (Madrid) y un centro productivo en Tianjin (China), que no están incluidos en la operación con CEN. Además de la venta de Abengoa, el Puerto de Sevilla también ha autorizado 1.500 metros extra para la firma industrial Tecade, que ya tiene casi 30.000, y otros 5.200 metros para Estibadora Sevillana.
Una operación oculta a la Bolsa
Abengoa ha ocultado desde que entró en crisis en el verano de 2015 que Inabensa fuera un activo en venta. Pese al interés demostrado por empresas como Siemens o el fondo de capital riesgo Springwater, que visitaron las instalaciones de Torrecuéllar (Sevilla) acompañados de directivos de Abengoa entre final de 2015 y principios de 2016, la empresa guardó silencio.
Tanto es así que ni siquiera aparecía Inabensa como un activo en venta en el plan de reestructuración enviado por Abengoa a la Bolsa en agosto, cuando logró por fin pactarlo con sus acreedores financieros. El tiempo ha acabado mostrando que Inabensa y sus activos sí que están en venta, y el traspaso de la planta de Sevilla y el resto de la parcela que posee y que está en desuso es la mejor prueba. ¿Por qué lo ha ocultado Abengoa a los inversores y el conjunto del mercado?
Quizá porque Inabensa es la pieza “más sensible” del rompecabezas de Abengoa ya que es la empresa heredera del negocio fundacional de la compañía en 1941, el de ingeniería eléctrica. Y su expresidente y aún máximo accionista, Felipe Benjumea, siempre ha transmitido que jamás renunciará al legado de su padre, y fundador de Abengoa, Javier Benjumea. Pero los activos de Sevilla ya se han vendido y la propia actividad podría traspasarse más tarde.
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