Inés Montoro, una joven sevillana que se encontraba anoche en el aeropuerto de Atatürk, en Estambul (Turquía) ha dicho que lo vivido durante el atentado "fue horrible, con la gente huyendo sin rumbo, y muy asustados", aunque se ha felicitado de que nadie del grupo con el que viaja resultó herido.
Montoro ha explicado a Efe que formaba parte de un grupo de seis chicas con edades de 22 y 23 años que están haciendo un viaje Madrid-Manila, que anoche hacía escala en Estambul para coger un nuevo vuelo a las 2:00 AM de hoy con destino a Filipinas, y que finalmente se canceló, como todo el tráfico desde el aeropuerto.
"Fue un susto horroroso, aunque tuvimos la suerte de que nos pillara en la primera planta del aeropuerto, ya que si no, podría haber sido mucho peor", ha dicho, para relatar que la confusión era tal que incluso tenían más noticias por las llamadas que les hacían desde España que por lo que sabían en el mismo aeropuerto.
Ha señalado que "primero parecía que habían encontrado mochila bajo un asiento, luego que habían puesto una bomba en el pasillo, junto a donde estábamos, incluso no quisimos llamar a nuestro padres, porque no sabíamos si era normal en este país, pero se enteraron y nos llamaron".
La tensión en el aeropuerto, ha dicho, se mantuvo durante toda la noche, en la que al grupo de las seis chicas de Sevilla se unió un matrimonio de Málaga, un padre y un hijo de Valencia y un hombre de Madrid, que estuvieron juntos hasta que a las 6:00 de la madrugada fueron evacuados, y la compañía aérea los llevó a un hotel.
No obstante, "había un caos horrible, nos decían que saliésemos, pero había un gran colapso, además de que la gente se asustaba por todo, y salíamos corriendo al menor ruido, sin rumbo, huyendo a ningún sitio", hasta que pudieron salir del aeropuerto y ya se preparan para salir la próxima madrugada en el vuelo hacia Manila que anoche fue suspendido.
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