La hermandad de la Misericordia celebró en la noche del viernes una reunión con su cargadores para planificar la próxima salida procesional y la elección de capataces.
Fue una reunión más que importante, a la que asistieron 65 hermanos cargadores, porque en el seno de los cargadores estaban la incógnita de seguir o no cargando los pasos de la hermandad. Y era una incógnita, porque los rumores sobre que la JCC podía hacerse con los pasos de Misericordia tras dejar de cargar el Perdón eran cada vez más grandes, pero sólo rumores.
A la espera decapataces
El sistema empleado por la hermandad de la Misericordia puede ser entendido como bueno, pero no lo es.
Ahora los cargadores se disponen a saber en los próximos días quiénes serán sus capataces, pero estos capataces no podrán actuar hasta que sean designados como tal. Es decir, que todos esos cargadores que la última Semana Santa decidieron no seguir en sus cuadrillas y optar por otra, no tienen certeza a día de hoy de formar parte de las cuadrillas de la hermandad de la Misericordia.
Después de protagonizar el Año de la Misericordia, la cofradía ha reforzado su vinculación con el convento de las madres Carmelitas Descalzas, con la parroquia, pero tiene su asignatura pendiente en los cargadores, que por otro lado, han sido los que han representado a la hermandad en la procesión del Carmen y han ayudado en la verbena.
En el seno de las actuales cuadrillas de Misericordia hay buen ambiente y mucha ilusión. Ahora quedará por ver qué capataces serán designados para los dos pasos de la hermandad y cómo se formarán las cuadrillas para el misterio de Jesús de la Misericordia y el paso de palio de la Virgen de la Piedad.
Hasta entonces, no empezará el verdadero calendario de preparación.
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