Con los ánimos por las nubes, como era de esperar dado su segundo puesto en el pasado concurso, los abuelos del actual Carnaval Colombino vuelven a las tablas del Gran Teatro abanderando uno de los logros más codiciados por cuantos pasan por este certamen de coplas. Dicen que aquello que no se espera sabe mucho más dulce y así fue. Hacía muchos años que esta veterana peña no lograba estar entre las dos primeras agrupaciones más destacadas; los cambios importantes a todos los niveles lograron convencer al jurado, mostrando este nuevo elenco de personajes que se funden entre jóvenes y experimentados chirigoteros, creando un grupo que se adapta perfectamente a las nuevas exigencias de este concurso. Letras, música, voces, relaciones, buen ambiente y sobre todo, creatividad en cuanto al desarrollo de actividades sociales, que marcan una nueva etapa para estos Colombinos que no colonos, para evitar malos entendidos, en su peña en particular y en el Carnaval de Huelva en general. Para este concurso que se avecina, estos chirigoteros volverán a contarnos otra de sus extravagantes historias en las tablas del Gran Teatro de Huelva, el día 10 de enero y con el nombre ‘Zembrando el pánico’.
Pero más allá de concursos, premios y creatividad, esta peña se define como una gran familia, donde la esencia así como el bagaje personal y colectivo de la fiesta se transmite de forma natural, de generación en generación, donde sus más de 30 años de existencia han influido notablemente conformando lo que en la actualidad se vive.
Mujeres, hombres y también ‘viceversas’ disfrutan cada día de ensayo bajo la bandera de una peña que se ha ganado a pulso el respeto de cuantos conformamos esta fiesta y que el tiempo sólo ha servido para engrandecerla y vestir a la decenas de grupos que en la actualidad participan en este concurso. ‘La Colombina’, con el reflujo del los benditos febreros, más fuertes y motivados que nunca, con Pablo, Perfo, Roca, Japo, Silván (permítanme sus apodos) y tantos conocidos y emblemáticos nombres, ya mostraron sus armas con el gran pregón del pasado año, que siguen de una u otra forma en contacto y arrimando para que siga su curso. Los pilares importantes de esta chirigota siempre pertenecieron al grupo y las aportaciones llegaron desde cualquier parte, siempre que contribuyan, de ahí la diversidad de colaboradores: Víctor Quintero y José Manuel en la música de pasodoble y cuplés, respectivamente, así como afinando las voces. Las dirección de Roca, letras de Juan Manuel Álvarez, Nelli Conde, Saul Giraldo, José Antonio Alfonso y el apoyo, quizás lo mejor que tiene este grupo, de sus mujeres, sus hijos, sus amigos; todos y entre todos, sin diferenciar sus partes, contribuyen a que podamos seguir disfrutando en las tablas de esta peña, la infatigable colombina.
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