Huelva

La Noria y un lisiado pelotón cuartetero sí dan con la fórmula

La chirigota onubense ‘Las peía’ y el cuarteto sevillano ‘3ª guerra mundial’ salvan una noche en la que Isla Cristina (Fran Sosa) no encontró la pócima para ganarse al público

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  • Las peía -

A priori, el punto de mayor calidad artística y representativa de la segunda noche de preliminares iba a llegar desde Isla Cristina con la comparsa dirigida por el experimentado carnavalero isleño Fran Sosa, pero a ‘La fórmula secreta’ le faltaron ingredientes para que estos científicos carnavaleros dieran con la pócima del pellizco en el Gran Teatro onubense. Fueron de más a menos después de una presentanción que hacía presagiar una actuación sublime, pero los elementos de la probeta carnavalera se fueron evaporando conforme fue avanzando un repertorio bello en lo musical, pero demasiado vacío en el mensaje literario obra de Juan Venegas.
   Así las cosas, fueron otras las agrupaciones que dieron el punto de divertimento a la segunda noche de la batalla de coplas. Por un lado, el ‘brutízimo’ regreso al concurso de la Peña ‘La Noria’, que con el tipo de ‘Las peía’ compartieron con el respetable una carnavalera ‘despeía de zortero’. Exigente interpretación bien llevada en todo momento y un derroche de energía con resultados palpables en la satisfacción del público. Otro punto agradable de la noche fue el cuarteto sevillano ‘3ª guerra mundial’, que con un general corto de vista, un sargento sin brazos, un cabo cojo, un raso fumeta y un explorador con retraso madurativo lograron dibujar más de una carcajada gracias a una dinámica interpretación con especial mérito de un segundo cuplé en el que la famosa práctica del ‘mamading’ quedó resumida en ‘lo comío por lo servío’.
   También de mérito fue la actuación de la comparsa ‘Mi mundo’. Voces femeninas muy bien conjuntadas para hacer un colorido homenaje al mundo carnavalero, con sus bellezas y sus traiciones, bajo la dirección y música de Iván Giraldo y la letra de José David Díaz. Bella reivindicación del carnaval sin género, sin apellido femenino, porque el Carnaval para que sea sólo ha de hacerse con amor por esta cultura. Y de eso Iván Giraldo y su grupo tienen para regalar.
   Por último (muy último), la chirigota sevillana ‘Papeleichon corpereichon’. Original idea en el tipo, pero estos fabricantes de papelillos podían haber cantado su repertorio disfrazados de cualquier cosa. Enorme distancia entre el mensaje del disfraz y su representación,  con una lentitud musical muy poco chirigotera.

Las notas de audio de El Coronel
Noche muy por debajo del nivel que se esperaba, sin grandes sorpresas. Las agrupaciones que se esperaban más punteras no llegaron a crear un gran impacto, y menos asistencia al coliseo onubense que el primer día. Normalidad y continuos intentos de la presentadora Noelia Muiño de alentar a un público dormido.

Mi mundo
Comparsa aceptable, cuyo director tiene la difícil tarea de compaginar el trabajo creativo en dos agrupaciones. Grupo bien cantado, pero del que se puede esperar mucho más. Esperemos que lo consigan en semifinales.

Papeleichon corporeichon
Dinámicos en la presentación, pero en general, con todos los respetos, es un grupo aburrido que no logró activar al público. El tipo de fabricantes de papelillos es un poco rebuscado y no supieron sacarle partido. Excesiva monotonía y lentitud en los pasodobles y resto de la representación.

3ª guerra mundial
Grata sorpresa. Hacía tiempo que no veíamos un cuarteto tan joven en el Gran Teatro, y supo captar la atención del público. Repertorio lleno de ‘trocherías’, muy simpático, bien interpretado y muy acorde con su tipo, metidos en todo momento en su papel y personajes que gustaron mucho al poco público asistente. Un cuarteto para poder ver, con casi total seguridad, en la siguiente fase del concurso.

La fórmula secreta
Defraudó en cierta medida al público. Grupo poco trabajado para lo que nos tiene acostumbrado su autor Fran Sosa. Aunque soy partidario de que cada uno cante lo que le dé la gana, pero letras demasiado de Isla Cristina, y el público no conectó con ese tipo de letras. Sensaciones por momentos de falta de coordinación en un grupo que no llegó a ser compacto, algo no habitual para uno de los grandes autores onubenses como es Fran Sosa. Costó mucho motivar al público con este grupo. Se esperaba una grupación más puntera. Lo mejor, el tipo.

Las peía
Grata sorpresa descubrir el tipo que iba detrás de este peculiar nombre. El grupo logró enganchar rápidamente con el público. Respeto al tipo en todo momento, muy buena interpretación para defender un repertorio que requería de gran esfuerzo en las gargantas. Ritmo frenético. Presentación digna de primeros premios, dinámica, divertida, bien estructurada, creativa, simpática. Le sacan partido a los distintos personajes y a las cualidades de los intérpretes. Logran meterse al público en el bolsillo. Alarde de teatralidad en el popurrí. Pedazo de chirigota.

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