Las encuestas no acertaron ni en los resultados, ni en las tendencias. Una vez más confundieron a todos, ¡Vaya ridículo!; dos horas basura en televisión. Ningún responsable demoscópico ha anunciado que dimite, o que renuncia a la minuta que con dinero público han pagado las televisiones públicas. A continuación, conocidos los resultados, todos mostraron su orgullo y satisfacción por los resultados obtenidos, incluso muchos de ellos los calificaban de históricos, como el PSOE, que es cierto, o el partido animalista PACMA que ha conseguido más votos que PNV, Bildu o Coalición Canaria, lo cual no significa que los animales estén mejor representados que los vascos, porque la injusta y terrible regla d’Hondt, como se queja Rivera, ha dejado a los representantes de los animales sin escaños y sin embargo los vascos si tienen representación. Aquí no fracasa nadie, nadie ha perdido, no dimite nadie, todos piden otra oportunidad y muchos sostienen que incluso son los electores los que se equivocan. Pero la realidad, es clara: el Partido Popular ha obtenido 669.220 votos más, y 52 diputados más que el PSOE. Aun así, el bipartidismo, afortunadamente, ha resucitado. Casi dos de cada tres diputados en el nuevo Congreso serán de una de las dos fuerzas que han gobernado España desde 1982. Y esos votos han salido de PSOE, C’s, UPyD y Vox que han perdido respecto de las pasadas elecciones 627.569 votos que han ido a parar muy probablemente al Partido Popular, que ha arañado importantes nichos electorales situados a su izquierda y a su derecha. Ha triunfado la estrategia del voto útil diseñada por el PP.
Una vez más se demuestra que las fusiones no siempre suman, y a veces se pierde energía por el camino. La gente de Podemos sumó demasiado rápido y se han atragantado. Podemos ni adelanta al PSOE, ni se acercan al PP, ni consiguen asomarse al poder. Además tienen que gestionar aliados, confluencias, mareas y otras gaitas con muchas pretensiones que no comparten la idea de partido y de dirección de Iglesias y su grupo de amigos.
No me ha sorprendido esta situación. Conozco muy bien la resistencia del PP, su suelo electoral es asombroso; con tantos elementos en contra hemos resistido y defendido todos la condición de primer partido y de partido de gobierno. No obstante, si antes de las elecciones la situación de España era preocupante, después de las elecciones lo sigue siendo. PP y PSOE deben dar ejemplo de lo que son y deben ser, los partidos hegemónicos del centro derecha y la izquierda española y llevar a este país donde merece.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es
