Pienso, luego estorbo

Un poco imputado

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Se puede estar un poco imputado? ¿Se imaginan ustedes a una mujer un poco embarazada o casi embarazada? Hay estados que no admiten puntos medios. Pues a pesar de ello, en estos días el PSOE ha intentado explicar esa nueva figura procesal, el casi imputado, para evitar la renuncia al escaño de Chaves, Griñán, Zarrias y otros diputados andaluces aforados por el caso de los ERES falsos. Hace unos meses, los altos dirigentes del PSOE, fueron muy claros y contundentes en distintas declaraciones; tanto Susana Díaz como el Secretario General prometieron que obligarían a dimitir a los aforados si el Tribunal Supremo los imputaba. Ese momento ha llegado y aquel compromiso no se ha cumplido. Simplemente. Ellos solos pusieron la línea roja y ellos son los que han incumplido su palabra. 


Cuando se imputa a una persona es porque como dice la ley, existen “indicios racionales de criminalidad…”, si bien es cierto que el Tribunal Supremo no les acusa de ningún delito concreto, sí lo hace la juez Alaya, que por eso da traslado al Supremo, al ser Diputados/Senador y por tanto aforados. Por tanto decir que esa imputación es para colaborar con la Justicia, o que es voluntaria, me parece un poco de cachondeo, porque de no haber estado aforados, ya habrían pasado como imputados por el despacho de la jueza Alaya. Por tanto, imputados con todas las letras.


Pero dicho esto, otra cosa bien distinta es en qué punto procesal debe llegar la dimisión irrevocable de un político, y por tanto tener que abandonar su escaño de diputado…Debate sin duda interesante y controvertido. Yo lo tengo claro. En mi opinión, esa dimisión debería situarse en el momento de apertura de juicio oral y nunca antes, ya que es a partir de ese momento cuando se está procesalmente acusado de la comisión de un delito, que no condenado. Porque ser imputado, no es sinónimo ni mucho menos de ser corrupto, ni de ser culpable ni en absoluto de ser un delincuente. Hay imputados que acaban siendo condenados y otros son absueltos a los cinco minutos de declarar, por su inocencia. De lo contrario, se podría estar a que cuatro impresentables, que los hay, presenten una denuncia penal contra un político, por cualquier motivo, aunque no exista, para que abandone su responsabilidad política. Hay una gran diferencia entre ser citado a declarar como imputado y que un auto judicial te impute después de esa declaración y del desarrollo de la instrucción penal. Nunca debemos olvidar, aunque en el periodismo sea difícil, porque lo fácil es el titular, que la presunción de inocencia es para todos hasta que llega la sentencia. Nadie es culpable hasta que no se demuestre en un juicio justo.


Si se tiene que dimitir, que se dimita, y no solo un poco. En el caso de Chaves y Griñan, no se puede dimitir de presidente de la Junta y refugiarse de diputado o senador; igual que Ana Mato. Por tanto, estar ligeramente imputado es como estar ligeramente embarazada. Ósea, imposible ese estado.

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