El Ayuntamiento de Málaga actuará de intermediario en el conflicto en Jilosa, la empresa distribuidora de Repsol en Málaga, tras los tres despidos realizados en el marco de la negociación del nuevo convenio colectivo. Un problema que ha llegado hasta el pleno, de la mano de IU, que recrimina que la mercantil presione con bajadas pese a obtener beneficios.
El conflicto en Jilosa, distribuidora de Repsol en Málaga, ha llegado hasta el pleno de este viernes. Una sesión en la que el Ayuntamiento ha mostrado su solidaridad con los empleados, a petición de Izquierda Unida, para que actúe incluso como intermediaria para negociar el nuevo convenio colectivo, motivo de la disputa y que les llevará la próxima semana a la huelga.
Los empleados recriminan que Repsol está presionando para abaratar el coste del transporte de mercancías peligrosas por Málaga, intentando precarizar el servicio con importantes bajadas de salarios, pese a formar parte de un grupo que obtiene beneficios.
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