Sevilla

El Cristo de Medinaceli, del altar a la viñeta

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Demostrando que el cómic no es incompatible con nada, los hermanos Damián y David Díaz-Cantelar, tras cinco años editando cómics sobre la Semana Santa sevillana, se adentran en la madrileña con un tebeo sobre la imagen del Cristo de Medinaceli.

Respaldados por unas cifras que superan los 12.000 ejemplares vendidos con los cinco volúmenes publicados de "Viñetas Cofrades. Historias y leyendas de la Semana Santa de Sevilla", estos dos sevillanos se aventuran en la Semana Santa madrileña con otro cómic que aborda desde un punto de vista muy "aséptico" la historia y leyendas sobre este otro "referente de devoción".

"El Cristo de Medinaceli es, después de las grandes devociones que hay en Andalucía, como el Gran Poder y la Macarena, un referente. Nos impresionaron mucho las colas en torno a su basílica para besar sus pies. Así que, con lo que vimos y con lo que investigamos, enseguida nos dimos cuenta de que daba juego para un solo volumen", ha dicho Damián Díaz-Cantelar.

Y así ha sido. Ya disponible en librerías, esta entrega especial de "Viñetas Cofrades", que sale junto al quinto volumen de su colección sevillana, aborda los principales acontecimientos y leyendas que se conocen sobre esta imagen, desde que fuera creada en Sevilla en la primera mitad de s. XVII, hasta nuestros días.

"Procuramos ser lo más asépticos posible porque somos conscientes de que esto debe llegar a todo el mundo. Con los temas políticos intentamos que no hieran sensibilidades ajustándonos a los hechos reales con mucho respeto y mucho rigor histórico", ha descrito sobre esta obra, que antes de nacer ya contaba con el beneplácito de la Archicofradía de la Real e Ilustre Esclavitud de N.P Jesús Nazareno.

El cómic, formato grapa de 24 páginas a todo color, recoge en grandes viñetas de sencilla composición la leyenda que cuenta el milagro que obró la imagen para ser liberada de manos del sultán Muley Ismail en la segunda mitad del S.XVII.

Ya en el s. XX, los hermanos sevillanos narran el periplo del Nazareno en la Guerra Civil por diversos lugares dentro de España y luego a Ginebra, y cómo en 1939, al final de la contienda, regresó a la capital española, donde fue recibido con fervor.

"Estamos muy contentos; el cómic le gusta a la mayoría de la gente que vive la Semana Santa o que sólo siente curiosidad, pero también hay un sector de nuestro público que nunca se ha interesado por ella y le gusta por las cosas que contamos", ha destacado Damián.

Y lo que cuentan, antes de llegar al papel, ha pasado por un filtro, ya que en el equipo que ambos hermanos dirigen en la empresa de diseño Estudio Buenavista en Sevilla hay gente "ajena" y desconocedora del mundo de las cofradías, lo que les obliga a ser "muy descriptivos con el guión" y "con los asuntos relacionados con la simbología de las cofradías".

"Hay una viñeta del Cristo en procesión por la plaza Mayor madrileña en 1682. En esa época -relata como anécdota-, la estatua de Carlos III no estaba colocada en el centro: se puso ahí en el s. XIX. Antes de entregar el trabajo me di cuenta y tuvimos que poner un bocadillo para tapar la escultura".

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