El Colegio de Economistas de Málaga ha resaltado este viernes que la provincia tira del crecimiento en Andalucía y que "se consolida como la locomotora" de la economía de la región, pero advierten de que persiste el "lastre" de la falta de crédito, que ha caído un 2,5 por ciento en el último trimestre de 2014, después de varios meses estancado. Aún así, han trasladado un mensaje "positivo y consistente de cara al futuro".
Así lo han señalado este viernes el decano del Colegio de Economistas de Málaga, Juan Carlos Robles; el vicedecano del Colegio, Antonio Pedraza, y el director del servicio de estudios económicos del organismo, Fernando de Alcázar, durante la presentación del Barómetro Económico de la provincia relativo al cuarto trimestre de 2014, que arroja datos "alentadores" de una recuperación que este organismo considera que "está consolidada de una forma especial en la provincia de Málaga".
Así, el Barómetro señala que el PIB previsto para 2015 mantiene un diferencial positivo de dos décimas respecto al conjunto de Andalucía. En concreto, las estimaciones apuntan a un crecimiento del 2,2 por ciento en Málaga, frente al dos por ciento de la región. Al buen ritmo del sector turístico y el agroalimentario, se suman la recuperación de la automoción y el inmobiliario.
En cuanto al desempleo, la tasa de paro interanual desciende un 5,34 por ciento en la provincia en 2014, frente al descenso nacional y autonómico de en torno al dos por ciento. Así, Málaga cerró 2014 con un 30,9 por ciento de paro, cuatro puntos por debajo de Andalucía (34,2 por ciento).
Asimismo, la afiliación a la seguridad social aumenta por sexto mes. En diciembre del pasado año el número de afiliados creció en 22.016 personas, lo que significa un 4,54 por ciento más que el año anterior, frente al 1,46 por ciento de Andalucía.
También son positivos los indicadores relativos a la licitación pública, cuyo aumento se consolida, al número de viviendas visadas, las cifras de turismos matriculados y la balanza comercial. Otro dato que han destacado como indicativo de un cambio de tendencia en la salud del tejido empresarial malagueño es la reducción de un 27 por ciento en el número de procedimientos concursales en 2014.
A pesar de todo esto, el Colegio de Economistas ha advertido de que para que la evolución del mercado de trabajo mejore se necesita crecer más rápido y para ello hace falta más liquidez, insistiendo en que "el apalancamiento financiero" sigue afectando a la creación de empleo. Así, en palabras del decano de este organismo, Juan Carlos Robles, el acceso al crédito es "la última pata de la mesa".
"Que las entidades financieras se enteren de verdad de que tienen que prestar dinero porque, entre otras cosas, es su negocio. No pueden estar permanentemente agazapados como han estado durante la crisis", ha sostenido Robles.
No obstante, han considerado que "tarde o temprano" se tiene que producir una recuperación en este sentido, porque "se está forzando a ello desde el Banco Central Europeo (BCE)". Así, Pedraza ha afirmado que desde principios de 2015 el crédito empieza a fluir y ha confiado en que con el plan puesto en marcha por el presidente del BCE, Mario Draghi, "los bancos van a tener más liquidez y no van a tener más remedio que colocarla".
El vicedecano del Colegio ha explicado que el contexto europeo también invita al optimismo porque "se nota cierta recuperación" que, aunque es "irregular", está liderada "curiosamente" por Alemania y España, según ha dicho. "España se está convirtiendo en una economía que tira del tren europeo", ha afirmado.
En este contexto global, hay varios factores que pueden beneficiar a consolidar la recuperación en España, entre ellos la bajada del precio del petróleo, los tipos de interés rozando el cero, y el euro devaluándose respecto al dólar. Por contra, según los economistas, la "inestabilidad política" y un año de repetidas citas electorales, con "incertidumbre" pueden ser "contraproducente para el país".
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