Otra vez voy a aburrirles con el tema de las cocheras del tranvía de Sevilla, pero es que mi buen amigo Juan Ignacio Zoido me ha dejado asombrado con eso de hacer de la prolongación del tranvía hasta Santa Justa y la desaparición de las cocheras del Prado su gran promesa electoral. Llevo nada menos que desde 2008 defendiendo a los vecinos frente a esa actuación en la cual, utilizando una subsanación de errores en la revisión del PGOU, se cambió la calificación de unos suelos que eran residenciales en manzana para construir cocheras y oficinas a toda prisa y presentar el metrocentro como el gran logro del Sr. Monteseirín. Y con ello alteró por completo la vida en unas viviendas que desde entonces vienen soportando los ruidos, gases, etc. que dimanan de unas instalaciones como ésas.
En su día simplemente el Ayuntamiento no admitió a trámite por insostenibles las pretensiones de los vecinos, y tras un largo contencioso la Sala nos dio la razón, obligando a tramitar la solicitud y revocando esa inadmisión a trámite. Había que empezar de nuevo pero con el respaldo del tribunal. Entonces el PP era oposición y aplaudió la sentencia. Para nuestra sorpresa, en vez de cumplir esa sentencia sin más, el Ayuntamiento reinicia el expediente pero no resuelve nada y nos obliga a iniciar un nuevo proceso, que es paralizado por una negociación finalmente infructuosa con la Gerencia, y que nos ha hecho perder todo un año negociando sobre la base de que reconocían que llevábamos razón.
Así, el pasado febrero ese mismo Ayuntamiento nos dice que no va a llegar a acuerdos y resuelve expresamente denegar nuestras pretensiones. Tan es así que esta semana pasada la he dedicado, una vez reiniciado el proceso judicial, a articular los argumentos de los vecinos y formular la demanda contenciosa. Pero he aquí que en medio de ello el propio alcalde dice que hay una sentencia que le obliga a cambiar las alineaciones y a llevar el tranvía a Santa Justa y que es su gran proyecto. Todo eso cuando a su vez la asesoría jurídica municipal tendrá que oponerse a la demanda y sostener que no llevamos razón y que no hay causa para eliminar esa cocheras y trasladarlas, como ha hecho expresamente el Pleno presidido por el mismo alcalde al desestimar la petición de los vecinos y pedir el preceptivo informe del Consejo Consultivo.
Sencillamente es imposible entender nada, y solo me queda pedir perdón por volver sobre este tema, pero no puedo menos que intentar aclarar algo en que no logro comprender una vez más la actuación de nuestros políticos que pueden prometer cuanto tengan por conveniente aunque ello sea claramente incongruente y se contradiga con lo que al mismo tiempo han hecho.
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