La tribuna de El Puerto

Nuevos aires

Leocadia Benavente | No es ni siquiera cuestión de generosidad, es cuestión de responsabilidad, de entender que los ciudadanos votan para que sus representantes

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Leocadia Benavente

Parece que, con el cambio de candidato, algo se está moviendo en la estrategia del PP. En el último pleno municipal el grupo popular ha dejado atrás su estrategia de votar a todo que no, aunque fuera en perjuicio de los intereses municipales, a aceptar que hay temas que deben dejarse fuera de la estrategia política.

No es ni siquiera cuestión de generosidad, es cuestión de responsabilidad, de entender que los ciudadanos votan para que sus representantes hagan lo mejor para el municipio. Es verdad que es más fácil tener altura de miras cuando uno no ha sufrido en carnes propias la incomprensión de la oposición. En la época en la que gobernaba el PP con el PA, había temas que se daba por hecho que se iban a votar en positivo y como mucho, la oposición se abstenía, y había hasta que darle las gracias.

El machaque que se sufrió en aquella época en los plenos fue intenso. Algún león de la Metro de aquella época parece hoy un lindo gatito. La realidad se impone, el PP está a la baja en todos los niveles, y parece que el problema no es de candidatos sino del partido en sí, que “no transmite”. Una buena parte de su electorado se ha visto traicionado, y es muy difícil remediar esa situación.

El electorado natural se divide entre los que superan los sesenta y cinco años y los hijos y nietos de éstos que van pasando a las filas de Ciudadanos. O por ley de vida o por que no son la primera opción de los jóvenes, elección tras elección ve cada vez más complicada su situación política. En estas condiciones, para el PP gobernar el municipio va a pasar por pactar con una o dos fuerzas políticas o mantenerse cuatro años más en la oposición. Hay que suavizar las guerras de antaño si se quiere tener aliados con los que conformar alternativa de gobierno.

Eliminar la línea seguida hasta ahora en los plenos de cuanto peor, mejor, va por ese camino. Si Ciudadanos mantiene candidata (que yo no me termino de creer que no se quiten de en medio a Silvia Gómez), la ecuación puede no salirle al PP de ninguna de las maneras. Aunque ahora se empeñen en ponerse cara de perros, la realidad es que los dos partidos se necesitan. En el pleno tenemos el ejemplo de entendimiento, un PSOE con IU en minoría que busca los apoyos de Levantemos desde fuera.

Tenemos que acostumbrarnos a que en adelante va a ser así. La política española se ha italianizado. Los partidos tienen que hacer de tripas corazón y entenderse. El PP tiene que quitarse ese Sambenito de ser un partido antipático y mostrar dotes para pactar, porque sí o sí va a necesitarlo. 

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