Curioso Empedernido

Mucho que pensar

Decía Miguel de Cervantes que “lo que se sabe sentir se sabe decir” y es que es muy importante hablar desde nuestros corazones sin sermonear ni herir

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La observación del ser humano y de la propia realidad en el mundo en el que nos ha tocado vivir nos da mucho que pensar. Y esa reflexión nos da ideas que vaciamos hacia el exterior. Lo importante es que nos entiendan, si estamos en la obligación de decir algo, porque si nos proponemos decirlo todo terminamos  aburriendo.

Sabemos que el tiempo como dice la máxima alemana es capaz de destruirlo todo lo construido pero la lengua va más allá y  acaba con todo lo que está por construir., aunque cierto es que aquellos que más hablan suelen ser los que menos tienen que decir.

Hay quienes dicen vulgaridades con corrección y propiedad e intentan engañar a los más listos, abultando las pequeñas cosas y disminuyendo las grandes, aunque siempre hemos de cuidar las palabras porque son las que acercan a los seres humanos mientras los silencios suelen destruir.

Decía Miguel de Cervantes que “lo que se sabe sentir se sabe decir” y es que es muy importante hablar desde nuestros corazones sin sermonear ni herir, sabiendo callar a tiempo ya que cuando mucho se dice, mucho se yerra y se termina ante la ausencia de ideas por decir tonterías.
Nos olvidamos con frecuencia que para dialogar con alguien , hemos de tener la curiosidad de preguntar primero y escuchar después, y poner nuestra confianza en los hechos y no fiarnos demasiado de aquello que nos quieren envolver con su retórica.

Pensamos y meditamos antes de pronunciar palabra, y nos parece espantoso que hablen de nosotros, pero pasado el tiempo nos damos cuenta que hay algo mucho peor que no hablen, que nos ignoren o que seamos invisibles a los ojos de los otros.

Si en cada momentono decimos lo que queremos nos exponemos a oír lo que no queremos, cuando un instante de pensar equivale a una hora de hablar, y como decía Platón llegamos a la conclusión que “solo sabemos una cosa, que cada vez sabemos menos”.
 

En determinadas situaciones la realidad nos obliga  a realizar un exhaustivo análisis de las actitudes de los miembros de cualquier comunidad hacia sus deberes ineludibles, lejos de fanfarronadasprovocadoras,desafortunadas u  oportunistas.

Cuando estamos inspirados es como si todo pasara ante nosotros con absoluta claridad, como si fuéramos capaces de ver más allá de  nuestras narices y analizamos la realidad desde otras perspectivas. Aceptamos los cambios de quienes conocemos y queremos con naturalidad y respeto y sin dramatismos.

Hay gente, sin embargo, que no es capaz de salir de su yo y se mueven entre recelos, amenazas, ruindades y obstrucciones. Dilapidan gran parte de su tiempo entre el enfado y la irritación, envidias y miserias que les impiden andar su camino y vivir su vida.

Ante nuestros errores hemos de aprender a perdonarnos y sacar ese superhéroe que llevamos dentro , a liderar las pequeñas revoluciones de cada día para comprendernos a nosotros mismos y entender a los demás., a dar pasos adelantes y estar más cerca de ver realizados nuestros sueños.

En este gran espectáculo del mundo nos topamos con personas importantes y personajes imprescindibles, respetemos y aprendamos de las primeras y desconfiemos y estemos en guardia con los segundos. A veces no hagamos nada y empleemos nuestro tiempo en pensar, nos daremos cuenta de muchas cosas que nos habían pasado desapercibidas.

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