Curioso Empedernido

La hora del miedo

A la hora del miedo todo el mundo pierde la confianza, y entre desasosiegos e incertidumbres lo pequeño nos parece inmenso, lo cercano lejano y lo próximo distante

Publicidad AiPublicidad Ai

Permítanme, queridos lectores del Viva Campo de Gibraltar, que desde este balcón de la vida y la calle, les recuerde que cuando conmemoramos, el  Día Internacional de los Derechos Humanos, exija que nadie padezca en sus carnes ni en su espíritu la degradación de tener que luchar por aquello que ninguna persona  debería perder, desde la libertad en cualquiera de sus manifestaciones a la dignidad en sus distintos aspectos.

A la hora del miedo todo el mundo pierde la confianza, y entre desasosiegos e incertidumbres lo pequeño nos parece inmenso, lo cercano lejano y lo próximo distante. Hay demasiada gente agobiada, que ante la acumulación de asuntos sin solución ni perspectiva de esperanza, estaría dispuesta a gritar ¡no podemos consentirlo!, pero es posible que termine diciendo ¡ya no puedo más!

Pero tirar la toalla, es además de convertirnos en una víctima más de la situación de crisis, renunciar a nuestra condición de ciudadano para desempeñar el papel de súbdito. Mantener la energía desbordante de plantar cara a las arbitrariedades y superar la zozobra de vivir en una angustia permanente por la inseguridad del futuro.

El actual gobierno del PP, lejos de inspirar confianza y seguridad provoca una sensación de amenaza social y política, que en la mayoría de las  ocasiones  paraliza y anestesia los deseos de cambio, generando una sensación de parálisis y dé marcha atrás en los derechos de la ciudadanía.

Desde que gobierna este país el señor Rajoy, una de sus líneas estratégicas ha sido infundir temor, construyendo con un nuevo modelo económico una sociedad más dual y desigual, lo que nos hace individual y colectivamente más inseguros y miedosos.

Cualquier aspecto de nuestras vidas que analicemos está invadido de este sobresalto entre el vacío y la desesperanza en la que nos han instalado, utilizando todo tipo de mensajes y recortando nuestros derechos en aspectos básicos de nuestras vidas.

Para asustar y amedrentar al conjunto de los trabajadores y trabajadoras de este país, han puesto en marcha una reforma laboral que reduce los salarios, las cotizaciones a la Seguridad Social, los costes del despido, precariza los contratos, acaba con el sindicalismo de clase y la negociación colectiva y da todo el poder con escasos límites a la empresa.

Con su política de recortes están intentando dinamitar el Estado del Bienestar en España, poniendo bombas a los sistemas de Educación y Salud públicas, reduciendo a cotas inimaginables la red de Servicios Sociales Comunitarios y Especializados, castigando a los pensionistas y extinguiendo poco a poco la Ley de Dependencia.

Pero además ustedes con tal de favorecer a los suyos , no cesan en el empeño de que con sus decisiones esta sociedad sea cada vez más desequilibrada  y más injusta , y así en el último estudio que recoge la revista Forbes , Amancio Ortega, Rafael Pino y Juan Roig figuran como las tres más grandes fortunas de España y nos dicen además que en plena crisis ,los más ricos del país han elevado su fortuna un 9,2%  en el último año, mientras que el resto somos cada día más pobres y tenemos menos poder adquisitivo.

Todo esto no es casual ni es solo consecuencia de la crisis, sino que es un objetivo perfectamente diseñado para entre la aprensión, la desconfianza  el desasosiego, sintamos no miedo, sino si es posible pánico y hagamos la reflexión con nosotros mismos para concluir en un estado entre la resignación y el conformismo, ¡menos mal, podíamos estar peor!

Pero si se nos ocurre tener un gesto de dignidad y pudiéramos salir a protestar a la calle para eso está la Ley de Seguridad Ciudadana o “Mordaza” en la que está prohibido hasta fantasear, poco menos que casi una vuelta al antiguo Tribunal de Orden Público del franquismo.Podíamos seguir, pero para qué, y yo me pregunto con ustedes si esto no es infundir la psicología del miedo, pues que venga Dios y lo vea.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN