Esta mañana me he enterado de algo que ignoraba. A pesar de que fueron el Partido Popular y el PA los que obtuvieron más votos y mejores resultados en las urnas en mayo de 2011 parece ser que es el PSOE el que ha gobernado a lo largo de los últimos cuatro años y sigue gobernando tanto la Mancomunidad de municipios como Arcgisa. Es lo que se desprende, al menos, del panfletillo con el que los populares barreños –¡quién lo diría!– han ornamentado las calles de Los Barrios hoy, en lugar de ocuparse de que las limpien como se debiera. Por cierto, no sabía tampoco que el PP local con David Gil a la cabeza –muy desesperado debe de estar el hombre y muy crudo se lo deben pintar las encuestas– se hubiera echado al monte y, sobre todo, a esas maneras de los pancartistas antisistemas de las que tanto reniegan los de su clase. Ni sabía tampoco que su compañero de filas el señor Lara, a pesar de ser vicepresidente de la institución comarcal y responsable de la empresa pública que gestiona los servicios tuviera en el organigrama de una y otra algo así como un papel de florero. Eso sí, florero bastante caro. Como caro salen los otros tantos liberados compañeros suyos de filas que a costa del canon que Arcgisa paga a Mancomunidad se embolsan nada más y nada menos que en torno a los seiscientos mil euros anuales, si no me fallan las cuentas.
En dicho panfletillo el señor Gil y los populares barreños difunden –digo yo que será por la cosa de los nervios– unas cuantas trolas que no se sostienen. Pero la más gorda de todas ellas es que afirman que el PSOE se niega a que el Ayuntamiento negocie un nuevo convenio de cesión cuando la realidad es que quien de verdad se opone es precisamente la formación política a la que pertenecen, que es la que ostenta la mayoría en la junta de comarca y hasta hace bien poco era incluso apoyada por el PA.
Lamentándolo mucho he de afirmar que en este asunto Gil y el PP de Los Barrios han llegado al colmo de la falsedad y de la demagogia. Y no me extraña, ya que desde 2012 para acá han contado todos ellos con una buena escuela, la de los andalucistas, con Jorge Romero al frente.
El señor Gil tendrá que explicarle a los ciudadanos el desbarajuste que podría estar contribuyendo a originar si, una vez que el pleno asuma la nulidad del convenio con mancomunidad, la empresa dependiente de esta institución decide no prestar ya los servicios de agua, basura y alcantarillado y le pasa la pelota al Ayuntamiento. Todo un marrón y un embrollo para el Consistorio, que, por si no tuviera bastante con el problemón que se le viene encima ante la más que probable readmisión de los despedidos cuyas plazas fueron amortizadas hace tres años, se vería además obligado a reincorporar en su plantilla a los trabajadores que en su día fueron transferidos a Arcgisa.
Resulta toda una ironía que sean los populares de Los Barrios los que acusan falsamente de pretender una subida del agua al PSOE, que desde 2011 prácticamente no tiene responsabilidad ninguna en esta materia, cuando han sido ellos los que han subido todos los impuestos y tasas que podían subir desde que forman parte del actual equipo de gobierno y encima han preparado, si no me equivoco, un catastrazo que los vecinos notaremos cuando vayamos a abonar el recibo de la contribución de este ejercicio de 2015.
El presidente del PP barreño acusa a los socialistas de haber perdido el norte. Pero mucho temo que quien ha perdido el norte es él. Lo he comentado en numerosas ocasiones cada vez que se me ha brindado la oportunidad. Gil unió su destino al de Romero y, al hacerlo, cometió un error que, salvo mejor criterio, ha marcado, no sé si para siempre, pero sí de momento para mal, su futuro político por estas latitudes. Permitió que el alcalde andalucista le diera el abrazo del oso y va a pagar o, mejor dicho, está pagando ya por ello.
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