Jerez

Urgencias en Jerez

Insultar al personal sanitario que hace lo que puede, además de injusto, no sirve para nada.

Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai

Hay algo que da más miedo que necesitar acudir a las urgencias médicas y es el servicio de urgencias del hospital de Jerez. Siempre masificado, puedes pasar allí mal acomodado en una silla en una sala repleta cuatro horas antes que llegue tu turno. Si no puedes entrar por tu propio pie, tendrás que disputarte las escasas sillas de ruedas. Desde que el gobierno de la Junta sustituyó médicos por gestores, se prefiere gastar los presupuestos en primas que premian por emplear pocos medios. En lugar de usarlos para aumentar el número de médicos, enfermeros, personal, material y servicios austeramente recortados .Las camillas son también raras y los lugares para ocuparlas los pasillos. Si por fin te ve un médico te pasaran a la sala de tratamientos. Unos desvencijados sillones que nunca he visto limpiar y que usan sin parar una persona tras otra, sin ser cubiertos ni por sábanas ni por papeles higiénicos. Allí descubrirás cuán escaso es el personal, los enfermeros y enfermeras son rara avis, con suerte y poniéndote a la cola los auxiliares te atenderán.

Si las personas mayores que se están tratando están tranquilas les dirán a sus cuidadores que abandonen la sala. Lo que no quiere decir que las atienda nadie. He visto a una anciana que ni siquiera podía entender lo que le pasaba llevar un tarro para un análisis de orina en la mano durante horas, hasta que sus familiares pudieron entrar a verla y decirles que así pueden quedarse esperando. La dilatación de la elaboración de pruebas y de la entrega de resultados en ningún caso puede llamarse urgente. Si para decidir que te estás muriendo necesitan una radiografía, llevarás horas en el tanatorio cuando te toque la vez.

El número de altas es considerable entre las voluntarias, muchas personas después de pasarse un día entero esperando recibir el tratamiento se marchan exasperadas,  por eso dicen quienes gestionan estos servicios que muchos de los que acuden no los necesitan.

El número de los sillones de tratamiento y el de camas, el de personal sanitario y el de medios resulta del todo insuficiente para la población que debe atender. ¿A qué esperan para solucionar un problema tan grave? A las quejas, hay que presentar reclamaciones y cuando éstas sean equiparables al mal estado del servicio, si la Junta no responde, realizar manifestaciones.Insultar al personal sanitario que hace lo que puede, además de injusto, no sirve para nada. 

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN