¿Cuántos niños comienzan a dar sus primeras patadas a un balón antes que aprender a caminar? ¿Cuántos de ellos se apuntan a equipos de fútbol sin apenas saber leer bien? ¿Cuántos sueñan con dedicarse a esto del fútbol? Podríamos decir que miles. No todo es tan fácil en este deporte. Si no que se lo digan a José Luis Rodríguez, o como lo conocen en este mundo, ‘Rodri’. Él es jugador del C.D. Guadalcacín y hace unos días renovó por tercer año en este club.
Fue a los 6 años de edad cuando Rodri comenzó a jugar al fútbol en un equipo federado, la Cruz Roja. En este club jerezano estuvo toda su infancia, hasta que fue a jugar con 12 años al Jerez F.C Alternativa. Esto le bastó para que el Xerez Club Deportivo pusiera sus ojos en él. Con 13 años se puso a las órdenes de Vicente Moreno en la cantera xerecista. Tres fueron los años que el jerezano perteneció al Xerez C.D. hasta que decidieran prescindir de él. Aquí fue cuando recibió una llamada de su ex entrenador Pachi, que actualmente se encontraba entrenando a los juveniles del C.D. Guadalcacín. “Llegué a los juveniles del Guadalcacín porque me llamó Pachi y vi una gran oportunidad de disfrutar en este club jugando al fútbol” cuenta Rodri.
A pesar de ello, siempre ha estado centrado en sus estudios sin perder de vista su futuro profesional, siendo consciente que el fútbol lo mismo que te lo da todo, también puede quitártelo. Y fue en su segunda temporada de juvenil, cuando el fútbol le regalaba buenas noticias. No era otra que la llamada que todo canterano espera. Ismael, entrenador del primer equipo, quiso que Rodri, con tan solo 17 años, estuviera en la lista de convocados. El jugador estuvo entrenando en múltiples ocasiones con el senior e yendo a partidos convocado, aunque aún era pronto, a juicio del entrenador, para debutar.
Al año siguiente, Ismael siguió confiando en él, aunque esta vez la responsabilidad era mayor, el Guadalcacín había ascendido a Tercera División. Rodri estaba preparado, con 18 años y el conocimiento de lo que significaba el senior. Debutó y jugó varios partidos en Tercera. “Es una categoría complicada, el cambio de juvenil a Tercera se nota muchísimo y había que ser persistentes y esforzarte en cada entreno”, señala. Fue uno de los tres canteranos que debutaron en Tercera División esa temporada.
A día de hoy lleva tres temporadas jugando en el primer equipo y siendo jugador prácticamente indiscutible en la plantilla. “El entrenador me suele poner en la posición de media punta o pivote defensivo normalmente, aunque disfruto más jugando de pivote. A pesar de ello, estoy a la total disposición del míster” explica Rodri.
Aunque no sea un jugador que venga destacando por sus goles, recuerda un gol de esta temporada que fue de vital importancia para que el equipo remontara y no descendiera. “Si perdíamos o empatábamos nos metíamos en el boquete. Íbamos 2-2 contra el Recreativo de Huelva jugando fuera de casa, y en el minuto 93 me llega un balón al punto de penalti y hago una chilena que acaba en gol. La verdad es que puede ser el gol más bonito de mi vida, no solo por la ejecución, sino por lo que significaba para el equipo”.
Viene siendo uno de los jóvenes con más proyección, aunque él mismo dice que “estoy estudiando la carrera de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte y estoy centrado en terminarla. Aunque por supuesto me encantaría vivir del fútbol, pero soy consciente y de momento puedo llevar las dos cosas adelante” explica. Además, “hay muchos jugadores de Tercera, incluso de Segunda B que están trabajando y jugando, por eso no hay problema”.
Tras la renovación, Rodri no piensa en otro club, aunque “en el futuro todo lo que venga habría que ser estudiado y colocarlo en la balanza para ver si me ayudaría a seguir progresando como futbolista. Ahora solo pienso en realizar una buena temporada con mi equipo y lo que venga ya se verá”.
También, el joven jerezano es consciente de las incapacidades económicas del club, aunque reconoce la gran labor que realizan cada año por mantener la categoría. “Desde este medio quiero animar a todos los aficionados al fútbol para que vengan a los partidos a animar al equipo. Esto es algo muy importante para nosotros. Esta temporada va a ser muy bonita y competida con los ascensos del Cádiz B y el Xerez C.D. y por supuesto, nosotros somos conscientes que podemos mantener la categoría, incluso optar a algo más” reconoce el jugador.
Esta temporada, además, el club le ha confiado a Rodri la categoría de pre-benjamines para que entrene a los más pequeños. Por ahora, el jugador, que tan solo tiene 20 años, confía en poder dar más de sí y en seguir progresando como futbolista, que es el sueño, que como muchos niños, tuvo de pequeño. De momento sigue el trabajo a las órdenes de Alberto Vázquez, un hombre que confía ciegamente en la factoría del Guadalcacín.
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