La candidata ultraderechista a las presidenciales francesas, Marine Le Pen, afirmó hoy que si gana las elecciones el 7 de mayo se terminará la línea del tren de alta velocidad (TGV) que conecta con España por el Mediterráneo en dirección a Barcelona.
"Creo que el TGV, en particular el que va al suroeste hasta España hay que terminarlo. Objetivamente, es un poco la vergüenza. Los españoles han terminado su parte y nosotros, no. Damos una muestra de debilidad", señaló.
Le Pen respondía así a una pregunta sobre sus planes para el desarrollo de la alta velocidad y de otras líneas de trenes en una entrevista al programa regional del canal de televisión "France 3".
Del resto de proyectos de alta velocidad, la candidata señaló que si se convierte en presidenta los analizará "caso por caso" e hizo notar que en el oeste de Francia la oferta está más desarrollada.
Actualmente está en servicio la línea de TGV desde París hasta Nimes, mientras que desde esa ciudad hasta Perpiñán los trenes tienen que utilizar la línea convencional, lo que implica una velocidad muy inferior.
La infraestructura de TGV también está operativa en el tramo internacional Perpiñán-Figueras y desde allí en dirección a Barcelona.
Por el oeste de Francia, a partir de comienzos de julio entrará en funcionamiento la alta velocidad en el tramo entre Tours y Burdeos, lo que recortará en una hora el trayecto entre esta última ciudad y París.
Se encuentra en proyecto la prolongación de ese ramal desde Burdeos hacia Toulouse y, eventualmente, otro hacia la frontera española por el País Vasco.
Marine Le Pen disputará la segunda vuelta de las presidenciales al socioliberal Emmanuel Macron, gran favorito de las encuestas.
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