Siempre ha ocurrido, pero la crisis económica ha acusado más que nunca la utilización de las cifras de los pobres como arma arrojadiza y de manipulación entre las fuerzas políticas, tanto las que gobiernan como las de la oposición. Ocurre en todo el país y Jerez, por supuesto, no se queda fuera. Sin embargo, hablar a la ligera de números de familias en una situación delicada y con menores de por medio a partir incluso de extrapolaciones de datos de otros estudios a nivel nacional puede resultar un arma de doble filo y hasta de mal gusto. Al igual que utilizar términos como pobreza extrema o exclusión social casi sin pensarlo y como sinónimos.
Esta última semana a raíz de una Proposición No de Ley presentada en el Congreso de los Diputados por parte la diputada socialista Mamen Sánchez para reforzar la ayuda en forma de alimentos básicos de calidad trascendía otro dato: “60.000 jerezanos no tiene recursos para comer” por atravesar una situación económica o familiar “de extrema necesidad”. Hace unos meses, también era el PSOE el que denunciaba que más13.000 menores atravesaban una situación de “extrema gravedad”. En este caso, este balance es el resultado de aplicar a Jerez y los 44.000 menores censados, los datos presentados a nivel nacional por Save the Children y Cáritas tras situar la tasa de riesgo de pobreza infantil en España en torno al 30% de la población menor. Craso error. El director de Cáritas Asidonia-Jerez, Francisco Domouso, no oculta su malestar cuando se aborda este asunto. “Nosotros no utilizamos el término umbral de pobreza porque no controlamos ese dato, que sí lo tiene la administración, ni tampoco atendemos a todas las personas que lo necesitan”. Esto ocurre, como precisa, bien porque por vergüenza no se atrevan a venir o recurran a la ayuda de familiares, o porque su asistencia se canalice a través de otra asociación u ONG y que, además, no tiene por qué tenerla registrada.
El margen de error, por tanto, es demasiado amplio para utilizar datos a la ligera, teniendo en cuenta que hay que diferenciar entre personas en riesgo de exclusión social, los denominados pobres, o las que están en situación de pobreza extrema. ¿En función de qué parámetros se puede ubicar a la población en uno de los conceptos? Como explica Domouso, por personas en riesgo de pobreza o exclusión social se entienden las que dispone de solo un 60% del ingreso medio del resto de la población, mientras que las que tienen entre el 40 y el 50% son catalogadas como “pobres” y con menos del 40% se hayan en situación de “pobreza extrema”.
“En nuestra ciudad no conocemos los ingresos de las personas y no tenemos datos contrastables para conocer esta magnitud, de ahí que nosotros constatemos que existe pobreza porque conocemos que hay personas con ingresos muy precarios o sin ingresos, pero no conocemos el dato de todos los jerezanos”, añade Domouso. En este sentido, la aproximación más rigurosa de Cáritas es la referente a a la memoria de 2013 presentada en junio. Según dicho estudio, 32.946 personas de la diócesis reciben asistencia de Cáritas de forma asidua, lo que sumado a las atendidas puntualmente hacen un total de 35.280 (32.703 en 2012 y 25.757 en 2011) y de ellas 11.187 procedían del Jerez Urbano.
Septiembre, un mes con un gasto extraordinario
Desde Cáritas advierten de que actualmente el umbral de pobreza está bajando como consecuencia de que el ingreso medio de la población está bajando. ¿Esto qué significa? Pues que personas que cobraban pensiones que hace un año estaban en el umbral, al bajar este, se quedan por encima. Sin embargo, como aclara Domouso, eso no implica que hayan dejado de ser pobres. En cualquier caso, sí puede afirmarse que la renta media es bastante más baja que hace pocos años. A día de hoy, además, muchas de las Cáritas de Jerez, donde trabajan voluntarios están desbordadas por peticiones no solo de alimentos sino de pagos de alquileres, y suministros de luz y otros, máxime en un mes como el actual donde además existen gastos extraordinarios como consecuencia del comienzo del curso. ¿Qué subsidios y pensiones pueden recibirse?¿Las reciben todos? Desgraciadamente no, bien porque las han agotado o porque aún las están tramitando: Entre las opciones están las pensiones no contributivas de 365,90€euros/mes y vitalicio (mínima de 91,48€); las pensiones de invalidez no contributivas de 548,85 euros; la pensión del seguro obligatorio de Vejez (Sovi), de 404,80 euros/mes y también vitalicia; la renta activa de inserción de 426 /mes por 11 meses, el subsidio por desempleo de 426 euros/ mes seis meses prorrogables y a 18 en algunos casos, y el Plan Prepara (para los que agotan el paro) 399,38, seis meses).Hay que puntualizar que el salario mínimo interprofesional está en 641,40€/mes, mientras que el IPREM (Indicador público de Renta de efectos múltiples) 532,51€euros/mes y lleva desde 2010 congelado.
La campaña de verano ‘alivia’ más hogares con problemas
Domouso reconoce un repunte de familias que han mejorado su situación por los contratos en verano, pero tiene claro que ello es “pan para hoy y hambre para mañana”.
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