El Partido Popular de Jaén afronta el próximo domingo su congreso provincial inmerso en una profunda fractura interna que la dirección regional intenta minimizar buscando in extremis un acuerdo de integración de las dos candidaturas, la de Miguel Moreno y la de Juan Diego Requena, en lo que sería un cierre en falso de su grave crisis orgánica.
La dirección regional del PP envió ayer hasta Jaén a su vicesecretario de Organización, Toni Martín, con la intención de propiciar un acuerdo, algo que se antojaba muy difícil a tenor de los reproches que las dos listas enfrentadas se han cruzado en las últimas horas. Las hostilidades se desataron al interpretar el auto del Juzgado desestimando la solicitud del alcalde de Porcuna de suspensión cautelar del congreso. Miguel Moreno, que nada más conocer el auto llamó “insumiso” y “desobediente” al presidente provincial, José Enrique Fernández de Moya, por no acatar la resolución del Comité de Derechos y Garantías autonómico, moduló horas después su mensaje abogando por la unidad “como la mejor manera de no hundir al partido”. Moreno dijo “acatar sin reservas” el auto del juez, descartó que vayan a recurrirlo y anunció que su candidatura estará presente el próximo domingo en un congreso que, según dijo, están convencidos de ganar “si se cumple con la limpieza”. Y es que Moreno se mostró “convencido” de que la candidatura oficialista impulsada por De Moya cumplirá con la resolución del Comité autonómico de Garantías, y que refrenda el auto judicial, para que se depure la lista de compromisarios y se le permita acceder a ella a lista de Moreno. “Si alguien desobedece esa resolución alguien tendrá que intervenir”, entonó Moreno, que dejó caer que De Moya se expondría a un expediente disciplinario de no atender el mandato del PP-A. También descartó acudir al Comité de Garantías del PP nacional, algo que sí podría haber hecho la otra candidatura para recurrir la resolución autonómica y que, a su juicio, no ha hecho “porque hubiera supuesto la suspensión del congreso”.
Eso sí, Moreno advirtió que, aunque acudirán al congreso, no descartan su impugnación, vía demanda en los tribunales, “en caso de que no haya limpieza”. Y el otro candidato, Juan Diego Requena, tampoco introdujo un mensaje conciliador que haga pensar una pronta salida de la crisis. “Miguel Moreno hace a ratos de Doctor Jekyll y Mr. Hyde, atacando y elogiando al presidente provincial según le conviene, lo que resulta patético”, dijo Requena tras sacar pecho por el “varapalo” que, en su opinión, le ha infringido el auto judicial a la candidatura de su rival. “Mientras la otra candidatura se ha dedicado a insultar, ofender, vilipendiar y manchar el buen nombre de nuestro partido, nosotros hemos fijado un objetivo y hemos avanzado en positivo sin tener en cuenta sus malas artes”, dijo en un comunicado.
Mientras, el presidente regional, Juanma Moreno, en su línea de tibieza durante esta crisis, consideró “un error” acudir a los tribunales, cuando el partido tiene órganos “reglados, capacitados y solventes, que son los que tienen que resolver cualquier conflicto cuando un afiliado vea que hay un menoscabo de sus derechos o intereses”. Una crítica que el candidato Miguel Moreno minimizó para no caldear más los ánimos.
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