Una cuarta parte de la plantilla del Ayuntamiento de Jaén (en torno a 360 empleados municipales) realiza en la actualidad funciones para las que no fue seleccionado y que, en la mayoría de los casos, no coinciden con su categoría laboral. Ejemplos como el de un conductor que realiza funciones de capataz y jefe de obras se están haciendo cada vez más habituales en el Consistorio jienense. La ausencia de una Relación de Puestos de Trabajo (RPT) –la moción aprobada en el Pleno está pendiente desde hace casi un año- y de un Reglamento de Movilidad y de Promoción Interna acentúa el descontrol en la plantilla y permite al área de Personal actuar con discrecionalidad.
La mayor parte de los empleados que están en áreas para las que no fueron contratados desarrollan funciones por encima de su categoría laboral. La prueba más evidente son los 300 decretos de superior categoría que están en vigor actualmente en el Consistorio y que permiten a otros tantos empleados desarrollar funciones de mayor responsabilidad. Los decretos de superior categoría siempre han existido pero en los últimos mandatos han perdido su carácter coyuntural para convertirse en algo estable. Se trata de un recurso que tiene el equipo de gobierno para distribuir la plantilla a su criterio, pero que tiene un indudable sobrecoste para las arcas municipales ya que, por término medio, los salarios se incrementan en un 20%.
Así las cosas, la oposición apremia al PP a elaborar la RPT para hacer frente a la racionalización de la plantilla municipal. “No es un problema de sobredimensión de la plantilla, es un problema de mala gestión y de no tener voluntad”, indica un edil del grupo socialista.
Prejubilaciones
El equipo de gobierno ha planteado dentro de la última revisión de su plan de ajuste adelgazar la plantilla por la vía de las prejubilaciones, una puerta que de momento tiene cerrada el Gobierno de la nación. En todo caso, de autorizarse esa medida el Consistorio ya ha estimado que serían unos 300 empleados (los mayores de 55 años) los que podrían beneficiarse de las prejubilaciones. Hasta entonces, la única medida en marcha es la tasa cero de reposición de la plantilla, con la única excepción de las áreas más sensibles del funcionamiento del Consistorio.
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