El proyecto ‘Mákula’ ha unido a un nutrido grupo de pintores de Jaén que reclaman un lugar en la escena cultural y que buscan programar actividades y exposiciones en la ciudad para reivindicar el elevado nivel con el que cuenta la provincia. Hay que aplaudir la iniciativa y desearle larga vida, porque nunca fue Jaén demasiado afortunada con las galerías de artistas plásticos. No hay más que recordar a la sala Jabalcuz de Josiane Phelix, esposa de Pepe Olivares, ya fallecida, que durante años programó exposiciones de los mejores pintores locales y del país y que, aunque es un referente, seguiría abierta de haber estado en cualquier otra ciudad. Y es también el momento de pedir de una vez a las administraciones, con o sin apoyo de la iniciativa privada, un museo exclusivo de pintores de Jaén en la capital, porque tenemos algunos de los más grandes de la pintura española: Zabaleta, Manuel Ángeles Ortiz, Rodríguez de la Torre, Fausto Olivares, su hermano Pepe, Cerezo, Viribay, Carmelo Palomino, Paco Carrillo, Santiago Idáñez, Ángeles Agrela, Cortés Zarrías, David Padilla, José Ríos y un largo etcétera, que han llevado el nombre de Jaén y lo siguen haciendo por medio mundo y que merecen un museo en Jaén, porque pocas provincias han dado a tan grandes pintores.
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