Jaén ha conseguido bajar en la última Encuesta de Población Activa de los 100.000 parados en la provincia, una noticia que hay que acoger con alegría y esperanza, sobre todo, porque los cifras sitúan la tasa de paro tres puntos por debajo del mismo periodo de 2013, cuando se registró una campaña histórica de aceituna. Esto quiere decir, ya que este año la campaña ha rondado el 60 por ciento menos, que el empleo que se ha creado en el último trimestre del año poco tiene que ver con el cultivo del olivar. Por tanto solo cabe que haya sido el sector servicios y sobre todo la hostelería y el comercio durante su campaña navideña, el que haya provocado este descenso, que aunque hay que tomarlo con cautela, es cierto que debe ser bienvenido. No obstante, y a pesar de todo, la provincia de Jaén se encuentra con una tasa del 33 por ciento, una de las más elevadas del país aún, por lo que es necesario que las administraciones trabajen para paliar esta dramática situación, que no se vive por igual en el resto de España. Tampoco hay que olvidar que también se ha perdido población activa como consecuencia de la crisis y de las emigraciones, por lo que los datos podrían ser engañosos. En cualquier caso, todo lo que signifique alejarse del 40 por ciento de tasa de paro que tuvimos hace dos años no debe más que alegrarnos. Otra cosa es si el empleo que se está creando, muy precario, servirá en el futuro para algo.
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