Está próxima la celebración del 8 de marzo, el que antes era Día de la Mujer Trabajadora y ahora es el Día Internacional de la Mujer. Y en El Puerto se ha presentado por parte de la Concejalía de Igualdad un programa muy extenso de actividades con su rueda de prensa, sus carteles y toda su parafernalia.
Pero me preocupa y mucho que desde la propia responsable política del área hasta las técnicas y muchas de las que luego se ponen de los nervios por un simple certamen de coquinera se esté banalizando algo tan importante como la lucha por la igualdad real entre hombres y mujeres.
Porque esa teniente de alcalde, muy de Izquierda Unida ella, acepta pertenecer a un Gobierno en el que por decreto del señor alcalde, primero van los hombres y luego las mujeres. Sí, tal como lo leen.
Empezando por el alcalde y hasta el cuarto teniente de alcalde son hombres, mientras que las cuatro mujeres que forman parte del bipartito, ocupan los cuatro últimos lugares del organigrama político entre la quinta y la octava tenencia de Alcaldía.
Mucho decirle a las niñas a qué tienen que jugar o qué deporte tienen que practicar, mucho pin en la solapa y mucha concentración para luego, cuando se está en el Gobierno y se puede, al menos, dar ejemplo, caer en errores de fondo tan garrafales.
Y miren que no le supongo ninguna intencionalidad al alcalde el día que hizo el decreto ni creo que sea fruto de ninguna decisión meditada. Pero si me apuran, casi más me preocupa que en el imaginario, el subconsciente sea capaz de hacer este tipo de interpretaciones.
Porque aunque sea por mera estética, en los últimos años la equiparación del hombre y mujer en política va dándose incluso mediante ley. Nadie puede hoy en día hacer una lista electoral saltándose la paridad made in Aido.
E incluso muchos, principalmente de la izquierda que conforma el bipartito, sacan pecho cuando en alguna estadística consiguen alguna mujer más que el contrario o que las existentes con anterioridad.
Y veo a algunas muy histéricas con las coquineras y misses flamencas pero que no han piado lo más mínimo con este asunto que, a mi entender, modesto, es mucho más grave y preocupante.
La lucha por la igualdad es tarea de todos y en todo momento, sin que se puedan cometer descuidos de esta índole. Reacción no ha habido ninguna.
El próximo día 8 se pondrán ellos y ellas, del equipo de Gobierno, muy dignos mientras día que pase así, siguen dándole patadas a la lucha por la igualdad real entre hombres y mujeres. Después querrán exigir a las empresas y a los demás. Ejemplo, señores políticos, ejemplo.
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