El portaaviones 'Juan Carlos I', el mayor barco construido para la Armada Española, con una largura que bien podría ser la cuarta torre de Madrid, es una auténtica ciudad flotante, con todos los servicios necesarios, y una capacidad para hasta 1.435 residentes.
Alrededor de las 10:00 horas, el considerado buque insignia de la Armada, operativo desde hace 9 años, ha recalado en el Muelle Sur del Puerto de Huelva, en el término de Palos de la Frontera, donde realiza escala en el marco del ejercicio MARFIBEX-81 es un ejercicio anfibio combinado cuyo objetivo es adiestrarse en el planeamiento y ejecución de operaciones anfibias y proyección del poder naval.
Su sola presencia ya impone si bien, aún lo hace más cuando uno se adentra en su interior, algo que han tenido la oportunidad de hacerlo esta mañana los periodistas y que, este fin de semana podrá hacerlo la población en general.
Escaleras de apenas un metro y con pequeños peldaños van permitiendo el acceso a las distintas cubiertas, más de 12, donde poco a poco se van descubriendo todas las instalaciones y los servicios con los que cuenta la embarcación, en la que la actividad no cesa ni un sólo minuto, para dar respuesta a las distintas misiones que tiene encomendadas.
Y es que, según ha explicado, el teniente de Navío Carlos Sánchez, oficial de información pública del Juan Carlos I, el 'Juan Carlos I' es un portaaeronaves con capacidad de desembarco, y multipropósito, es tiene distintos perfiles de misión.
Puede actuar con el rol de buque anfibio, embarcando una infantería marina con sus vehículos y con opción de desembarcarlos desde una distancia a costa para que en la playa puedan realizar sus ejercicios.
También tiene función de portaaviones; embarca tanto aviones con capacidad de despegue vertical como helicópteros de la Armada, del Ejército de Tierra, del Ejército del Aire e incluso, algunos de la Marina americana, con una capacidad para almacenar hasta 40 aeronaves.
La proyección estratégica es otra de sus funciones debido a su capacidad de almacenamiento de material que tiene y que puede llevar al escenario que se requiera para usarlo en la zona.
La cuarta misión es la de ayuda humanitaria, pues alberga abordo contenedores de alojamiento y disponen de un hospital completo con dos quirófanos, UCI, gabinete odontológico, farmacia, sala de rayos o laboratorio.
En esta ocasión, el buque llega a Huelva en torno al 60 por ciento de su capacidad, con unos 800 pasajeros, entre los que se encuentran la dotación del Estado Mayor del Grupo 2 de la Fuerza de Acción Naval, con 250 componentes y 319 Infantes de Marina de la armada española, 125 fuzileiros portugueses y 11 marines de EEUU.
Con respecto al ejercicio MARFIBEX-81, el capitán de Corbeta, Juan Díaz, ha explicado que es un ejercicio "intermedio básico anfibio" de respuesta de crisis, que se va a desarrollar en el Golfo de Cádiz, para el que "se monta un escenario en tierra sobre un Estado fallido, combinado con crisis humanitaria, grupos terroristas y rebeldes y nosotros bajo mandato de la OTAN y del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas asistimos al país que nos lo solicita a estabilizar la zona".
Un ejercicio de adiestramiento, función a la que, hasta ahora, se dedica el 'Juan Carlos I' ya que, por el momento, aún no ha participado en una misión real; si bien, está más que preparado y a la espera de que se le requiera para poder desplegar todo su potencial allá donde sea necesario.
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