Vecinos de la urbanización Río Piedras, en El Rompido, han alertado sobre la “excesiva peligrosidad” de la travesía que divide en dos este núcleo turístico ubicado en Cartaya, cuyos semáforos llevan “varios años sin funcionar” y donde los conductores “no respetan los límites de velocidad” establecidos para este tipo de vías.
Así lo han señalado a Andalucía Información varios propietarios de los 105 apartamentos que integran esta urbanización, cuyos residentes están obligados a atravesar diariamente la carretera por este punto para acceder a El Rompido.
En palabras de una de las residentes, Mari Carmen Mercado, que vive casi todo el año en dicha urbanización, la “peligrosidad es máxima, sobre todo para los niños y las personas mayores”. Esta vecina se queja de que “prácticamente todos los semáforos de la travesía llevan ya 3 ó 4 años sin funcionar”, al tiempo que señala que uno de ellos “corre incluso el riesgo de venirse materialmente abajo cualquier día debido a su mal estado”.
Mercado ha asegurado además que el año pasado se quejó “en varias ocasiones” telefónicamente al Ayuntamiento de Cartaya, y una vez más en lo que llevamos de verano, “pero por el momento nadie atiende a nuestras demandas”.
Esta vecina también ha querido poner el acento en un cartel publicitario instalado recientemente en medio de la acera y que “obstaculiza la visión al salir con el coche de la urbanización, lo cual añade aún más peligro a la travesía”.
PIDEN LA INSTALACIÓN DE BADENES SOBRE ELEVADOS
Otra de las vecina, Teresa Martín, que solo reside en le urbanización durante la temporada de verano, subraya igualmente la falta de funcionamiento de los semáforos ya que el tránsito de peatones “está actualmente solo regulado con pasos de cebra, que no son habitualmente respetados por los conductores”. A ello añade que “también podrían instalarse en la travesía badenes sobre elevados para obligar a los conductores a reducir la velocidad, como ya ocurre en la zona de La Galera”, por lo que “solo pedimos que sean reparados los semáforos y que se instalen varios badenes en la travesía”.
Por su parte Julia Hseiong, de nacionalidad británica y residente igualmente durante la temporada estival en la misma urbanización, resalta también la “peligrosidad” de la zona por falta de semáforos, por la obstaculización de la visibilidad por parte del cartel publicitario recientemente instalado y por el intenso tráfico en esta ápoca del año y la excesiva velocidad de los conductores.
ESCASEZ Y ABANDONO DE LOS CONTENEDORES DE BASURA DE LA ZONA
Finalmente, todas han coincidido también en expresar sus quejas ante el “lamentable” estado de los contenedores de basura de la zona, los cuales consideran “escasos” para el volumen de residuos que se generan en esta época del año, “incómodos” para depositar en ellos la basura, y “descuidados” por el fuerte olor que desprenden, y que aseguran, llega hasta sus casas. Según Mercado, “antes venían y los lavaban de vez en cuando, o los sustituían por otros limpios, pero ahora nada de eso”.
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