Desde hace ya más de un año, Guadix celebra una concentración mensual contra la violencia de género en la que se da lectura a varios textos que invitan a la reflexión y en la que, desde hace varios meses, el habitual minuto de silencio que se guarda en este tipo de citas se ha convertido en un minuto de NO silencio destinado a recordar a todas la víctimas y visibilizar a sus asesinos. La concentración del mes de enero se ha celebrado este martes día 25 y ya se ha invitado a los asistentes a participar también en la del mes de febrero, que se celebrará el día 24.
Integrantes de las diferentes asociaciones de mujeres de Guadix y anejos, jóvenes estudiantes, trabajadores municipales, Policía Local, Bomberos, concejales de la corporación municipal (con su alcaldesa Inmaculada Olea Laguna al frente) y ciudadanía en general se han dado cita en la Plaza de las Palomas a las doce del mediodía. Allí se ha dado lectura a diversos textos que invitan a reflexionar sobre la crudeza de esta realidad.
Para empezar, la alcaldesa accitana y responsable del área de Igualdad leído el artículo “Machismo supremo” de Miguel Lorente Acosta, en el que se hace una clara diferenciación entre opinión y desconocimiento de lo que exige el ejercicio de una profesión, una cuestión de responsabilidad “y no sólo de libertad de expresión”. “El conocimiento nos hace libres, por eso el machismo insiste tanto en el desconocimiento sobre la realidad de la desigualdad y la violencia de género, porque el poder está basado en la fuerza y en el desconocimiento. Nada es casual, y en la era Trump hemos entrado en un machismo exhibicionista y con una intensidad y beligerancia como no habíamos visto desde hace años. El diagnóstico es claro: estamos ante un machismo supremo", concluye el texto.
Los dos textos leídos por las representantes de las asociaciones de mujeres han vuelto a reivindicar un pacto de estado contra la violencia de género, puesto que hay “más asesinadas por violencia machista que por otros tipos de terrorismo”. Y han hecho una crónica sucinta pero cruenta de esta realidad que arroja nada menos que cinco mujeres asesinadas en lo que llevamos de año (todavía ni un mes completo).
“Hay que educar a los hombres desde pequeños. Educar en la tolerancia, la igualdad y el respeto. Hay que decirles a las mujeres que los príncipes azules no existen, que hay que huir (y ser tajantes en esa huida) al más mínimo gesto de maltrato por parte de esos tipos. Hay que insistir en que eso que algunos asesinos llaman amor no lo es en absoluto. Hay que recordar que una cosa es decir te quiero y otra demostrarlo. Hay que hacer gestos (manifestarse, alzar la voz, gritar basta ya…). Toda la ciudadanía debemos hacerlo. Y hay que exigir a los gobiernos que sean implacables en las aplicaciones de sus leyes. Implacables, insisto. Estos asesinos tienen que pagar por sus delitos. Ni uno solo debe librarse de la totalidad de las penas que le correspondan. Ninguna mujer se merece un destino así. Ninguna”, terminaba el último texto al que se ha dado lectura hoy.
Tal y como se detalla desde el Centro Municipal de Información a la Mujer (CMIM) del Ayuntamiento de Guadix, ésta es una de las medidas de visibilización programadas hace ya más de un año y que ha conseguido calar entre la población, ya que cada vez son más los que se suman a estas concentraciones mensuales en las que también participan las autoridades locales de la corporación municipal accitana. Se organiza mensualmente desde el propio CMIM en coordinación con las asociaciones de mujeres de Guadix y anejo.
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