Acerados y calzadas

No voy a descubrir ninguna novedad si hablo en esta carta del deplorable estado en el que se encuentran las calles en Jaén. Pero entiendo que ello no es...

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No voy a descubrir ninguna novedad si hablo en esta carta del deplorable estado en el que se encuentran las calles en Jaén. Pero entiendo que ello no es motivo para que otra voz, y a través de este medio, se alce para volver a decir que Jaén necesita un plan integral para limpiar y arreglar sus calles, y a pedirlo. Es notoria la desproporción que existe en la plantilla municipal entre sus trabajadores. En resumen, muchos trabajadores de despacho y pocos a pie de calle, que ejecuten este tipo de obras de arreglo y limpieza. Todo esto, unido a la falta de recursos económicos y al nivel de guarrería vecinal que hemos alcanzado, da lo que tenemos, y es que difícilmente hay alguna calle en Jaén que se pueda librar de una multitud de baches en su calzada y de desperfectos o suciedad en su acerado. Lo del Gran Eje es algo tremendo. Para ser una de las principales arterias de circulación de coches y viandantes en Jaén, está verdaderamente sucia y desgarbada. ¿Tanto cuesta pasar cada equis tiempo un camioncillo que arrastre la suciedad incrustada en su acerado mediante algún sistema de agua a presión con lejía por manguera o algo parecido? ¿Tanto cuesta reponer los árboles que faltan de varias de sus pocetas? También es cierto que no hay lógica ni sentido común alguno a la hora de acometer las obras en Jaén. Esta calle se reformó hace poco menos de diez años, y no habría costado ningún esfuerzo en soterrar los contenedores de basura, al modo que se hizo en el Paseo de la Estación, para no tener que ver la penosa imagen de que en cada arbolito se encuentren a la noche (y no tan de noche) la pella de tres o cuatro bolsas de basura, ahí, puestas.
Pienso que hay unos mínimos, y la limpieza y el arreglo de las calles deben estar entre ellos. Circular con un vehículo por Jaén es un auténtico suplicio, porque si a la falta de fluidez en la circulación y a la escasez de aparcamiento, hay que unirles un asfalto propio de un carril particular de una comunidad de regantes, pues molesta y mucho. Al fin y al cabo el servicio lo pagamos todos, y la correspondencia entre el estado de las calles y el IBI o el impuesto sobre vehículos de tracción mecánica (el sello) brillan por su ausencia. Métanle mano ya.

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