Quién dijo frío? No eran los refugiados sirios, atrapados entre los Balcanes y las islas de Grecia, a veinte grados bajo cero, ante la glacial indiferencia de la vieja Europa. Ni hablar de los desgraciados, cuasi desahuciados, hijos de la pobreza energética, que subsisten en este país helado sin un kilovatio de solidaridad. Tampoco el frío motero de miles de Pingüinos invadiendo Valladolid. Nada que ver con nuestro frío. Un frío cálido de verbena postnavideña, trotante por el casco antiguo de Jaén, la noche del pasado sábado. San Antón, como evento popular, dinámico y participativo, jubiloso y autoafirmativo, ya es un hito histórico, un precedente inexcusable para instituciones, autoridades y público en general, de cara a años venideros, en el combate impenitente del frío. La edición de este año, la de este sábado, la de las veintidós hogueras y los doce mil corredores, mostró con qué punto de naturalidad la gente hace propias causas tan nobles como la preservación del alma de ciertas tradiciones que fomentan la salvación del cuerpo. Otra espléndida noche jahenciana, repleta de ganas de hacerle frente al invierno, al frío. Doce mil retos individuales, sacrificios personales con tal de alcanzar la meta en la Noche de San Antón, que concluyen en un éxito colectivo, un hecho identitario y unificador donde todo el mundo es bien venido por bien avenido, y el calor humano se garantiza ordenadamente merced a una suma de dorsales consecutivos. Viva San Antón. Muera el frío.
Mareas blancas por una sanidad pública de calidad, entretanto, el domingo, se sucedían en Granada, Málaga, Huelva y, por vez primera, Sevilla. La rebelión del médico de urgencias Spiriman en la ciudad de la Alhambra se extiende por otros reductos del depauperado Estado del Bienestar andaluz. En la capital granadina, con esta quinta manifestación convocada contra la fusión hospitalaria y en pos de la conservación de dos hospitales completos, el pulso a la Junta se mantiene. Globos rojos y blancos, junto a narices coloradas de payaso y pancartas que rezaban lacónicas: “Susana no sana nada”. La inoportunidad de la protesta solo puede entenderse en el seno del PSOE en clave interna sucesoria al estar la presidenta de Andalucía, plena y personalmente, implicada en la búsqueda de un nuevo liderazgo para el partido del puño y la rosa. Primarias en mayo para elegir al secretario general y 39 Congreso Federal los días 17 y 18 de junio. Patxi López da el primer paso. Su condición de ex colaborador del defenestrado Pedro Sánchez invitaría a pensar que los partidarios del líder caído están detrás de él, pero la realidad es distinta. Sánchez no dijo aún esta boca es mía, López más parece pretender erigirse en una tercera vía –proclive, como buen oficialista, a integrarse caso de verse claramente en inferioridad numérica- , en tanto Díaz principia hoy una gira por las baronías territoriales socialistas, con parada estelar en FITUR, que se inaugura pasado mañana en IFEMA. El pabellón de Andalucía, estand de Jaén incluido, se antoja a priori pintiparado teatro de operaciones.
Úbeda/Baeza, Patrimonio Mundial, volverá a ser uno de los principales reclamos de Jaén, por más que Diputación, el motor financiero de la promoción provincial, subraye como grandes efemérides de esta tierra durante 2017 los aniversarios de la muerte de Miguel Hernández (75) y de la creación de la marca “Jaén, Paraíso Interior” (20). El patrimonio ibérico jienense, desde el omnipresente Cástulo a la recepcionada obra –este mismo miércoles- del interminable Museo Íbero, las declaraciones UNESCO pendientes del Paisaje del Olivar y de la Santa Iglesia Catedral de la Asunción de la Virgen, el Oleoturismo y los AOVEs ‘Jaén Selección’, y el creciente interés empresarial por ensanchar la oferta complementaria en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas –del barquito solar que surca El Tranco, once de los doce meses del año, a los incipientes movimientos para la autorización administrativa de una segunda reserva faunística, no muy lejana de la existente ya en Collado del Almendral- completarían, grosso modo, el programa de anhelos y prioridades de un turismo autóctono acostumbrado al calentito invierno que le dispensan las instituciones en ferias, misiones comerciales y workshops de este tipo. Fuera, bien lo saben los dirigentes empresariales de nuestro sector turístico, siempre hizo demasiado frío.
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