Estábamos tan tranquilos en el patio dando vueltas, cuando de pronto nos llegó la sorprendente noticia. Parece que en La Isla han dado con la maldita tecla de una vez por todas. Por fin algún grupo municipal se preocupa de verdad por los temas que traen sin comer y sin dormir a un montón de ciudadanos.
Precisamente ha sido Ciudadanos el que ha puesto el dedo en la llaga y ha descubierto dónde está la solución a tantos males como aquejan a La Isla. Ha dicho que el próximo jueves 29 de junio, día de San Pedro y San Pablo, va a proponer en el Pleno ordinario una moción encaminada a concienciar a los ciudadanos y en especial a los más jóvenes a disminuir el consumo de azúcar.
Quiera Dios que mis nietos no se enteren del tema, porque se van a enfadar bastante y van a decir que no comen hasta que les ponga los caramelos por delante. Además, será una medida inclusiva para aquellos que padezcan problemas de diabetes, es decir, que los incluye. ¡Estuviera bien que no los incluyera! En resumen, que la propuesta va a ser que en la cabalgata de Reyes del día 5 de enero se sustituyan los caramelos que tiran sus majestades por un sustitutivo con menor índice glucémico. No se puede decir con palabras más rebuscadas y finas, aunque en cristiano raso creo que estos señores lo que quieren decir es que desde las carrozas se tiren caramelos sin azúcar.
Menos mal que alguien ha dado con la solución eficaz a los problemas gordos de La Isla. Muchas gracias y ahora lo que tenemos que hacer es ponernos todos a la ardua tarea de luchar por que los caramelos no lleven azúcar. Tenemos tiempo hasta enero del 18. Aunque vamos por partes. Muchos cañaíllas y todos los locos nos preguntamos cantidad de cosas.
Encima de que los Reyes Magos y su corte nos traen los caramelos gratis, que es lo que más gusta en esta ciudad, ¿les vamos a exigir que los traigan sin azúcar? De ahí se pasa a que los caramelos tengan piñones y luego a una sofisticación mayor hasta acabar con la paciencia de sus majestades.
Por lo visto, muchos creerán que las bolsas de caramelos que vienen de Oriente las compraron los Reyes por un euro como si se tratara del Banco Popular. Además, a Ciudadanos se les ha olvidado decir que, aparte del azúcar, el verdadero peligro de los caramelos está en la velocidad con que los tiran. Y, ¿por qué se plantea el tema con tanta antelación, si en un par de horas se pueden sustituir los caramelos con azúcar por los otros? ¿Por qué se escoge el día de San Pedro y de San Pablo? ¿Eran acaso apóstoles adictos al azúcar? De San Pablo se explica, porque quizás se cayera del caballo debido a un golpe glucémico, pero de San Pedro no lo acabo de entender, si lo suyo era pescar.
Tampoco entiendo esa obsesión por el consumo de caramelos. Aquí sabemos todos que los niños y sus respectivos padres se matan por coger la multitud de caramelos que tiran los Reyes y sus pajes, incluso poniendo paraguas para coger más y metiéndose debajo de las ruedas de los tractores. Y después, ¿saben estos señores lo que hace cada familia con los caramelos que cogen? Yo se lo digo: ni los prueban, los guardan en una bolsa y al cabo de un tiempo los tiran a la basura.
Otra cosa. Ciudadanos también ha apuntado que, como institución pública, el Ayuntamiento tiene el deber de educar y servir de ejemplo. Pues el otro día vi a un concejal chupando un caramelo de fresa. Así no vamos a ninguna parte. Y por último, ¿qué van a decir los dentistas? ¿Se van a conformar con que arruinemos su auténtico negocio?
En todo caso, vuelvo a dar las gracias al ácido Ciudadanos, porque se ve que están muy atentos a lo que realmente les preocupa a los otros ciudadanos.
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