Hace dos semanas escribí sobre la influencia de Merkel y Obama sobre el PSOE para que permita la gobernabilidad del PP y no tengamos que ir nuevamente a las urnas.
Pues bien, parece que ya ha habido contactos, según se deduce de las declaraciones de Felipe González ayer mismo en las que insta al PSOE a que se abstenga en la investidura de Rajoy.
Por otra parte, tanto el portavoz socialista como Susana Díaz hacen hincapié en que la decisión de los españoles es que se vayan a la oposición y aquí viene la contradicción: ¿cómo es posible estar en la oposición si le dicen no a la formación del gobierno? Para que haya oposición tienen que haber gobierno y lo habrá antes de las vacaciones de agosto.
Si a nivel nacional la cosa tiene mandanga, a nivel local los problemas no son menores.
Cierto es que aquí tenemos gobierno pero no gobierna, porque hay concejalías que están huérfanas y eso es un verdadero disparate, así que se intenta hacer algún que otro pacto con alguno de los partidos presentes en la corporación municipal…, y enlazando con mi artículo de la pasada semana cuando brindaron no con copa sino con botella, siempre según rumores que durante estos días siguen de boca en boca ampliando al brindis al resto de los invitados… que al parecer van a entonar el “mea culpa” y el factótum los perdonará con el “ego te absolvo”.
Así pues insisto en mis conclusiones pasadas, dejemos los personalismos y las aversiones y formemos un gobierno con 15 concejales en beneficio de los portuenses, tal y como harán nuestros mayores en el gobierno nacional.
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