El mayor patrimonio que tiene el Recreativo es ser el primer club de España. La palabra Decano, esa que deberíamos de escribir en mayúsculas cuando hablamos de nuestro equipo, es una seña de identidad inconfundible. El Decanato es Historia, y la historia hay que protegerla, recordarla y entenderla. Pero también hacerla. No nos debe bastar con estar anclados en el pasado, con tropezar una y otra vez en la misma piedra. Por eso me enfada mucho que un grupo de recreativistas como es la Federación de Peñas ponga por encima “su” historia a la evolución de toda una afición. Por si no lo sabéis, están en contra de la nueva figura del Enlace de la Afición, algo nuevo, idea Decana en España y que no hace daño a nadie. Este grupo avasalló al actual consejo de administración, pero no tienen el valor de hacer públicas sus quejas. Es lo peor de esta semana, pero mi apoyo a la directiva actual para que miremos al frente y sigamos construyendo historia, y no al camino del odio, el malentendido y la ruptura interesada.
La noticia regular es la marcha de Juanma Rodríguez. Y digo regular porque que Juanma se vaya es malo, uno de los artífices de la salvación del otrora Recreativo B. Le deseo suerte y que todo mejore a nivel personal. Pero es regular por la buena noticia de ver a Jesús Vázquez ahí, ocupando ese puesto. Se apoya en Moisés Sánchez, que ha tenido facilidades del Cartaya para que le ayude en esta difícil tarea. Y es que mantener al Atlético Onubense en Tercera no es fácil. Estoy seguro que nuestro Gran Capitán compensará su falta de experiencia en los banquillos con su capacidad de trabajo y pundonor. Estaremos atento a cómo juega, yo espero que aprendiera mucho de Marcelino y al menos vaya practicando con eso de los dos delanteros.
Y la buena noticia es reciente. Es sólo un aliento más en el camino, pero que Gabriel Cruz diga que ve cerca el acuerdo con Hacienda es algo especial. Yo no sé a vosotros, pero ese acuerdo me vale tanto como un ascenso: será una alegría inmensa que debemos celebrar como se merece por parte de todos, y será duro porque tendremos que cumplir a rajatabla los compromisos económicos con la agencia pública para no caer de nuevo en la trampa. Es el embarazo de la noticia más esperada, sin dudas.
Una semana de historias malas, regulares y buenas que se debe coronar con la segunda victoria en nuestro feudo y que el equipo empiece a convencer con resultados. Al menos, esta vez deseamos que no haya un rival con silbato y se imparta justicia. ¡Seguimos!
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